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casa de fieras

Los Medici de nuestras cloacas

Las peores cloacas comienzan en los retretes más limpios

Todo era cartón piedra

¿Dónde está el DAO?

Alfonso J. Ussía

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Son personas admirables. Reciben premios, envidias, halagos, y sus paredes se alicatan con diplomas internacionales muy caros. Su reputación es alargada, intocable, brillante como una patena pulida en guante blanco de fino lino. Entran en los reservados acompañados del dueño de la sala. Los 'metres' apuntaron lo que pidieron en su última cena ... . Por eso recomiendan la lubina. La trajeron esta misma mañana. Hace mucho que perdieron el control de sus horarios. Una, dos y hasta tres agendas para cuadrar un tiempo que reparten entre iguales. Organizan veladas, van a desayunos informativos y los viernes huyen del despacho a la dehesa. Allí reciben visitas, hablan de cosas, reparten influencia, se piden otra copa, resuelven, organizan, comentan. Sus hijos son príncipes de la espuma de la vida. Las revistas de glamur y estilo codician su foto; mira qué boda más bonita, qué novia, qué islas. Educados, guapos, ricos, deportistas, impecables, sin arrugas. Qué formas, qué modos tan delicados cuando van fuera de casa. Se compran arte, pagan caridad, hablan idiomas.

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