Lente de aumento
El PSOE, telonero de las Tanxugueiras
Lo que sí será el PSOE mientras no desaloje al sanchismo que gangrena Ferraz es un escudero de los nacionalismos periféricos que andan desgarrando jirones de la Españita que glosa como nadie Chapu Apaolaza
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Iniciar sesiónEl PSOE, este PSOE, ha constatado ante los últimos nostálgicos del puño y la rosa que se negaban a salir de su vintage ensimismamiento, que su vocación es la del camaleón, adoptando el color que le haga falta para camuflarse según el hábitat y las ... necesidades de campaña. Ocurre que es tal su daltonismo ideológico que ha pasado de saurópsido escamoso a vergonzante comparsa. El PSOE, ese que sirve y del que se sirve Sánchez, ya no aspira a absorber siglas para luego fagocitarlas como ocurrió con Podemos; ni a colonizar una marca blanca como la plataforma, movimiento, agrupación o charanga que sea eso de Yolanda, la otra gallega vapuleada en estos comicios.
Lo que sí será el PSOE mientras no desaloje al sanchismo que gangrena Ferraz es un escudero de los nacionalismos periféricos que andan desgarrando jirones de la Españita que glosa como nadie Chapu Apaolaza. Le quedaba por amancebarse con el independentismo gallego, y eso se ha dedicado con fe de converso. Por orden de Moncloa, del Parque del Xurés a Finisterre, la franquicia gallega se echó a un lado para que pasara el BNG. Hasta Zapatero, convertido en la vieja gloria de un socialismo que justo con él comenzó a perder la dignidad y la vergüenza, no tuvo la deferencia ni el respeto ni la ética ni la estética de pedir el voto para su candidato, al que casi borra el nombre como en conjuro de meigas. Llegó un punto en el que Besteiro -¿o era Barreiro?- parecía un holograma, el increíble fenómeno del aspirante menguante. Si la campaña dura una semana más, el pobre de José Ramón -se llama así ¿no?- acaba engrosando la Santa Compaña, con Zapatero de Estadea, esperando que el PSOE amanezca, lo que no es poco viendo el terrible eclipse ideológico que atraviesa.
El que aquí teclea, que se dio a los pogos salvajes en tiempos donde aún lucía melena, tiene claro que puestos a ser teloneros mejor de Siniestro Total que acabar desafinando como telonero de las Tanxugueiras.
Pues eso, Miña Terra Galega, donde el cielo es siempre gris me da que al socialismo que con Sánchez nunca volverá, la invade la morriña, el dolor de Breogán y esta noche apagará la radio por si suena una muñeira y el llanto empieza a brotar.
Y Besteiro ¿dónde irá? ¿A una isla del Caribe?
Seguro que no lo veremos clamando ante el palacio del Nerón monclovita. Va tocando que el camaléon mude de color.
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