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El Rey y las manos del presidente

Desde Mao no se recordaba semejante metáfora del «gran timonel»

Álvaro Martínez

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Con Mariano Rajoy en el registro de Santa Pola, la banda del lazo amarillo ha centrado sus fobias y su ira contra el Rey, sabedores de que el «Gobierno bonito» ha optado por relajar tanto la respuesta del Estado al nuevo golpe que preparan -confirmado ... por Torra- que todo serán apelaciones monclovitas a la distensión y a ese diálogo de sordos por el que clama el «sector comprensivo», que se alza como la respuesta más ingenua y tontorrona que imaginarse pueda ante un reto tan trascendental como es la unidad de España. Tras el agresivo ataque a Don Felipe por parte de Torra, se pudo comprobar el tono insólitamente bajo (formato collejita de capellán a monaguillo díscolo) con el que el Ejecutivo de Sánchez contestó a la montuna andanada contra el Rey previa a su visita a Tarragona

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