Suscribete a
ABC Premium

Verdad prohibida

No hay partido que se atreva a advertir de que la fiesta se paga a crédito

Luis Ventoso

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Una frase tópica que suena linda proclama que «el dinero no da la felicidad». Ya, pero sin parné la vida se torna muy desabrida. El escritor irlandés Jonathan Swift aclaró perfectamente el término medio entre la codicia y la legítima aspiración al bienestar material: «Una ... persona sabia debe tener el dinero en su cabeza, pero nunca en su corazón». Tony Blair está desprestigiado porque tras salir del poder adoró al becerro de oro. Le obsesionaba amasar un fortunón, hasta el punto de que llegó a ejercer de consultor para sátrapas exóticos. Pero sería un error desdeñar a Blair por pesetero, pues continúa siendo un excelso politólogo. El lunes, en un discurso contra la chifladura del Brexit, trazó una elegante distinción entre las políticas de luces largas y las oportunistas: «En política la diferencia entre táctica y estrategia lo es todo. La táctica se ocupa de la política del momento. La estrategia va más allá del momento y trata de imaginar el largo plazo».

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia