Sobrevivir al estrago
Desde que lo conocí en París en 1991, donde fui a entrevistarlo a raíz de la publicación de «Abril Quebrado» , siempre pensé en él como un escritor tan típico del tiempo que le tocó vivir que cuando conversé con él luego varias veces ... siempre me asistía la convicción de encontrarme con el extraño superviviente de una de las etapas más infames de nuestra historia más reciente y esa sensación de extrañeza, con la consabida certeza de comprender la cautela y ambigüedad de su carácter, no me ha abandonado nunca. Escritor renombrado en su país en la época de Enver Hoxha , Ismaíl Kadaré representó como nadie en su país la necesidad moral y política del cambio de régimen que se avecinaba, y supo cumplir con ese destino. Tanto, que ya hoy día es imposible distinguir su valía literaria, enorme por otro lado, de su fama como referente político y moral de su país, Albania.
Obras de referencia
Aun y así, para los que seguimos leyéndole como narrador, libros como «El firmán de la ceguera», «La hija de Agamenón» o «El sucesor», son referenciales porque aúnan la historia cotidiana de un pequeño país de la Europa de hoy con la grandeza de la tragedia clásica. De su otra vertiente se sabe más porque es pública y está en boca de los medios cuando se trata de comprender el conflicto balcánico, fue fundamental a la hora de entender lo de Kosovo. Entiendo su alegría por el
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