En primera fila
Preocupaciones cuánticas
La nueva computación será capaz de reventar nuestras claves y el Gobierno no tiene aún un plan para protegernos
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión¿Cuántos años tardarán los ordenadores cuánticos en descifrar las claves secretas de nuestros correos electrónicos, de nuestras cuentas bancarias o, peor aún, de nuestros sistemas nacionales de seguridad y defensa? ¿A partir de qué momento podrán acceder a nuestros historiales médicos y exponerlos a ... nuestros empleadores, nuestras aseguradoras o a traficantes de órganos? Desde que Google anunció hace diez días su hito alcanzando la supremacía cuántica en computación para resolver un problema real mi turbación va en aumento según compruebo que nuestros gobiernos -el español y el europeo- están completamente dormidos ante esta compleja pero amenazante tecnología. Sabemos, por ejemplo, que será capaz de descifrar los sistemas actuales de claves secretas en cuestión de segundos y permitirá desarrollar herramientas de ciberseguridad impenetrables. Y eso, en román paladino, significa que el primer país en alcanzar ese nivel de desarrollo podrá intervenir las comunicaciones de las demás naciones, espiarlas o atacarlas, sin que ninguna sea capaz de contestar de la misma manera. ¿Se imaginan que pasaría si China fuera la primera potencia en conquistar ese hito? Pues sepan que lo está intentando. Pekín ha decidido invertir 10.000 millones de dólares en esta tecnología hasta el año 2030 (y algunas de sus corporaciones multinacionales están invirtiendo cantidades similares). La Unión Europea, de momento, no piensa dedicar más de 1.100 millones de dólares en los próximos cinco años. Y España, mientras tanto, ni siquiera ha publicado un plan estratégico, no ya para entrar en la carrera, sino simplemente para proteger a sus ciudadanos -especialmente a los más vulnerables- frente al uso que delincuentes o países rivales puedan hacer de esta tecnología. Y aún más triste es que nadie de la oposición lo reclame. En la permanente campaña electoral en la que vivimos solo importa el corto plazo y los problemas trascendentes quedan relegados a un segundo plano mucho más que antes.
Es evidente que nuestro país no tiene la capacidad económica de China, ni los colosos empresariales americanos. Ni siquiera la Unión Europea tiene lo uno ni lo otro. Pero tiene mucho más talento. Ya sabrán que el líder del algoritmo recientemente publicado por Google es Sergio Boixo, español pero ¿conocían que casi la mitad del departamento cuántico de IBM también lo es? ¿que el responsable global de Innovación de esta multinacional también lo es? ¿y pueden creer que otro compatriota, Juan Ignacio Cirac, es quien dirige la división de óptica cuántica en el puntero instituto alemán Max-Planck? ¿No les parece cuanto menos una vergüenza que en el país de origen de todos ellos el Gobierno no haya dedicado un minuto a hablar de los retos que conlleva esta tecnología?
El premio Nobel austríaco Erwin Schrödinger fue uno de los descubridores de la física cuántica e ilustró su propiedad de superposición con su famosa paradoja del gato que se encuentra vivo y muerto a la vez, hasta que se abre la caja que lo encierra y es descubierto en solo uno de los dos estados posibles. De la misma manera que el gato de Schrödinger, el Gobierno socialista se encuentra en un estado total de indefinición, solo preocupado por las cuentas electorales, de manera que no sabremos si tiene o no previsto enfrentarse al reto cuántico hasta después del 10-N. Pero, a diferencia de la paradoja de Schöringer , todo hace pensar que esta amenaza no entra en sus prioridades.
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete