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Violencia como arma política
Están tan envalentonados que desafían a las autoridades catalanas, que por el camino que van, terminarán pidiendo que la Guardia Civil las defienda
Eso de que los guardias corran delante de los transgresores sólo se da en los chistes de Gila y en las viñetas de Ibáñez, pero les ha salido un competidor nada despreciable en las algaradas barcelonesas, con la notable diferencia de que la cosa va ...
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