Jaime Bayly
Los dineros escondidos
Barclays se mudó, manejando un camión alquilado en el que llevaba todas sus cosas, a Georgetown, en la capital del país, Washington DC, obsesionado con terminar una novela torturada y confesional que había iniciado en Madrid, el año anterior.
Huyendo de un huracán que destruyó Miami, siguiendo a una mujer de la que se había enamorado, Barclays se mudó, manejando un camión alquilado en el que llevaba todas sus cosas, a Georgetown, en la capital del país, Washington DC, obsesionado con terminar una novela ...
Artículo solo para suscriptores
Si ya estás suscrito, inicia sesión
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete