Un gran español

Carlos era profundamente liberal en lo personal, pero un hombre de principios que estaba dispuesto a defenderlos sin pestañear

20/03/2020
Actualizado a las 18:55h.

Carlos Griñón ha sido mucho más que el personaje de revistas del corazón, famoso por sus matrimonios. Fue un emprendedor que produjo vino de gran calidad en Toledo cuando lo que allí se vendimiaba era absolutamente imbebible. Tuvo el enorme acierto de crear una denominación ... de origen personal que dio un enorme valor a su producción. Y después creó en la misma tierra unos aceites que llegarían a ser reconocidos como los mejores del mundo por un jurado italiano, el gran rival en la materia. Carlos era un emprendedor y tuvo muchas derrotas en sus negocios, pero una y otra vez se levantó con la ayuda de unos y otros –especialmente de sus hijos– porque creía en el producto que hacía que era el epítome del lujo español. Dedicó muchas horas en los últimos años de su vida a la promoción de la industria del lujo español y europeo y recorrió Europa proclamando las cifras que generaba esa industria. Y desde la vicepresidencia de la Real Academia de Gastronomía promovió la cocina española por el mundo.