Suscribete a
ABC Premium

Ignacio Camacho

España prohibida

A Colau le daba alergia la idea de ver las calles de su Barataria populista invadidas de parafernalia rojigualda

Ignacio Camacho

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Urticaria. Eso es lo que ha sentido Ada Colau al imaginar en las calles de Barcelona a una multitud congregada para ver los partidos de la selección en pantallas gigantes de plasma. Su Barataria populista invadida de banderas rojigualdas. Su pequeño reino de la autodeterminación ... alborotado por tribus juveniles capaces de tararear el himno y jalear los goles a voz en cuello y con las caras pintadas. Un aquelarre de patriotismo emocional desinhibido bajo la parafernalia futbolera. Un desafío intolerable a la mitología de la emancipación, una provocación de rancio españolismo unitario perpetrada por una horda de fachas.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia