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Cambalache en peligro

Hay afán por restaurar el falaz discurso del «nacionalismo moderado»

Hermann Tertsch

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Puigdemont pasea por Gante. Puigdemont se hace fotos con turistas. Puigdemont arenga a peregrinos de Gerona. Puigdemont pasea a españoles «progresistas». Puigdemont quiere volver. Puigdemont se quiere quedar. Puigdemont invita a Rajoy. Puigdemont desprecia a García Albiol. Los maltratados españoles ahora ya no solo estamos ... condenados a vivir todo el día pendientes de los malos humores e hipersensibilidades de una de las regiones más ricas y privilegiadas de España. Los españoles ahora hemos sido condenados a convivencia cotidiana en casa, de encender el televisor, con un delincuente mentiroso y charlatán. Todas las cadenas han decidido que es de vital importancia para todos nosotros saber en todo momento todo lo que diga, piense, pasee, respire, coma… Carles Puigdemont, ese ser mediocre enchufado del corrupto régimen, títere suplente de la mafia golpista.

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