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Lente de aumento

Un Papa políticamente correcto

Qué pena que el Sumo Pontífice acabe participando de las bufonadas populistas

Agustín Pery

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Me gusta pedir perdón. Lo hago habitualmente. A la familia, a mis sufridos compañeros de trabajo y a los amigos de los tiempos en los que tenía pelo y apenas tripa. No sólo porque sea consciente de que me he equivocado, también por el acto ... interesado de sentirme mejor. No soy un santurrón, antes de solicitar indulgencia, asumo que debo hacerlo, que verdaderamente existe un motivo y que efectivamente el culpable del desmán he sido yo.

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