El «abuelo» aún marcha
En los últimos Juegos Olímpicos de Pekín, «Chuso» García Bragado consiguió el cuarto puesto, con lo que fue el mejor atleta español en la cita asiática. En Berlín, este genial marchador ha vuelto a rendir de forma excepcional. El «abuelo» de la selección, aunque tiene ... las ganas de un juvenil, consigue el bronce a punto de cumplir los cuarenta años, que se dice pronto -su cumpleaños es el 1 de octubre-. Y lo hace 16 años después de colgarse el oro de forma magistral en el Mundial de Stuttgart (1993).
«Chuso» ha cambiado mucho su forma de competir desde que ganó aquel Mundial en Alemania. Ha mejorado notablemente en el aspecto técnico y no hace tanta flexión como antes en sus piernas. De ahí le vinieron las dos operaciones de cadera. Desde hace muchos años, García Bragado trabaja solo, sin la necesidad de un entrenador. Y ha modificado su rutina diaria, pues ha bajado el kilometraje total de sus entrenamientos. En el atletismo, y en la marcha especialmente, con la edad no hace falta tanta cantidad, hay que entrenar más la calidad. La base ya está hecha y se sabe que la recuperación es peor a medida que pasan los años. Hay que aumentar el periodo entre entrenamientos fuertes.
Después de los Juegos Olímpicos de Pekín, después de ese desagradecido cuarto puesto, ya le insinuaron que se retirara, que ya tenía edad como para pensar en dejarlo. Pero él sigue pensando en el Campeonato de Europa de Barcelona de 2010. Está hecho de una pasta especial y en el atletismo el cronómetro pone a cada uno en su sitio.
Hay un detalle a tener en cuenta. La media de edad de los tres representantes españoles en los 50 kilómetros marcha estaba cerca de los 37 años. Los abuelos siguen funcionando.
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