Los narcos gallegos apuestan por la 'ruta africana' para introducir cocaína

Para la Guardia Civil, que llevaba sobre la pista de estas organización desde principios de año, esta última gran operación contra el tráfico de drogas confirma la apuesta de los narcotraficantes gallegos por la 'ruta africana' para introducir en la península sustancias estupefacientes. Según el Instituto Armado, estas organizaciones gallegas han ido consolidando sus infraestructuras a lo largo de este itinerario. La 'ruta africana' es una de las más utilizadas por las grandes organizaciones del narcotráfico internacional al considerarla más segura que otras alternativas.

Y esa era la apuesta también de la red de narcotraficantes desarticulada esta semana después de la intercepción del pesquero con 3,3 toneladas y que supuestamente encabezaba un armador de Vigo, aunque la organización tenía ramificaciones en O Salnés, comarca donde fueron arrestados varios de sus presuntos integrantes. De hecho, los investigadores, habían podido comprobar cómo algunos miembros de la organización se habían desplazado a Senegal para organizar y coordinar personalmente este cargamento de cocaína. Se encargaron tanto del flete del barco, como de la contratación de la tripulación, simulando que el buque participaba en líticas campañas de pesca en aguas próximas a la costa africana. Además, ya tenían estudiado qué embarcaciones iban a salir al encuentro de este barco según se fuera acercando a su destino para hacer el trasvase de cocaína.

Los investigadores de la que acabaron bautizando como operación 'Sugar Brown' están muy satisfechos con el resultado de la intervención porque ha sido «una de las contadas ocasiones» en las que se han podido acreditar «todas las gestiones y encuentros» de los narcotraficantes para la introducción de ingentes cantidades de cocaína en territorio nacional. Los investigadores detectaron, más allá de esos movimientos en alta mar, los siguientes pasos que tenían preparados los miembros de la banda. Contaban con estudiados medios para transportar la cocaína por distintas provincias españolas, que incluso les permitía prescindir de los tradicionales coches lanzadera para detectar controles policiales. Y es que disponían de sofisticados métodos de ocultación en dobles fondos hidráulicos. También echaban mano de mensajería encriptada para comunicarse entre ellos.

Con todas estas pistas, la Guardia Civil pudo identificar el buque que estaba previsto que transportaría la cocaína y también a sus tripulantes. Lo localizaron, valiéndose de helicópteros, el pasado 18 de diciembre, tras una intensiva labor de búsqueda. En el abordaje fueron detenidos los tres tripulantes del barco y los agentes incautaron la droga que transportaba: 3.300 kilos de cocaína, según se pudo comprobar luego en el puerto de Santa Cruz de Tenerife, donde atracaron el pesquero apresado.

Y ese abordaje hizo que se precipitaran los acontecimientos en tierra, con un total de 13 detenciones en las provincias de Pontevedra, Orense y La Coruña en los 14 registros practicados, en los que también se intervino un kilo de heroína, otro 1,5 de cocaína, además de coches de alta gama y 20.000 euros en efectivo.

La operación Sugar Brown ha sido dirigida por el Juzgado de Instrucción número 1 de Vigo y por la Fiscalía Antidroga de Pontevedra, y llevada a cabo por el Equipo Contra el Crimen Organizado con sede en Galicia (ECO Galicia) de UCO junto al Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la UOPJ de Pontevedra. También han participado agentes del centro de coordinación de Canarias. Además, el Instituto Armado ha querido destacar la «excelente colaboración» con la Guardia Civil de la DEA estadounidense (Drug Enforcement Administration), NCA británica (National Crime Agency), MAOC (Centro de Análisis y Operaciones Marítimas en materia de Narcotráfico) y autoridades senegalesas.