Kevin Costner: «Hay muchas películas que quiero hacer, pero soy bastante cabeza dura»

- ¿Para una estrella de cine que jamás filmó la segunda parte de sus más grandes éxitos, no es gracioso verlo en el principio de la historia del mismo personaje del agente secreto Jack Ryan que interpretaron Harrison Ford, Alec Baldwin y Ben Affleck en otras cuatro películas?

- A mí también me hace gracia (ríe). La vida es como un viaje. Y definitivamente, mi vida fue un viaje cinematográfico donde las elecciones que tuve que tomar a lo largo de mi carrera se dieron así. No significa que yo no haya querido hacer dos o tres películas del mismo personaje, ni me siento superior a quienes lo hicieron. Simplemente decidí alejarme de las historias que había hecho y mirando hacia atrás me encantaría tener varios capítulos dos, de ciertas películas que hice, pero no funcionó así, para mi.

- ¿Pero no es cierto que 25 años atrás, usted mismo había rechazado el rol de Jack Ryan en la primera película «La caza del Octubre Rojo» que ahora apadrina en la nueva película «Jack Ryan: Operación sombra»?

- Tienes razón, esa película me la habían ofrecido en el momento en que yo estaba filmando No hay salida , con el mismo productor. Tampoco era una película que no quería hacer. No pude hacerla. Tenía otras obligaciones. El año anterior pensaba hacer una película y cuando terminé haciendo otra, ya estaba comprometido por segunda vez con la anterior. Ya no podía escaparme de nuevo. Tenía mis propios principios y no tenía dudas que la primera película del rol de Jack Ryan iba a ser un éxito en las recaudaciones, pero ya había dado mi palabra y tuve que hacer otra película.

- ¿Y si realmente hubiera aceptado protagonizar la película «La caza del Octubre Rojo», también hubiese quebrado el record de no filmar segundas y terceras partes, aceptando la serie de películas «Juego de Patriotas» y «Peligro inminente» que después terminó haciendo Harrison Ford?

- Hoy pienso que probablemente lo hubiera hecho. Supongo que se presta para esta clase de libros. También pude haber mostrado a Bull Durham en las grandes ligas y hubiera hecho una segunda película de Bailando con lobos para saber lo que pasó al final. Incluso con El guardaespaldas tuvimos discusiones para hacer una segunda película y hasta escribieron un guión. Me parece bien volver a interpretar un mismo personaje con el que estaba familiarizado. Por eso también me puso feliz que me llamaran para formar parte del principio de la historia de Jack Ryan, como un agente de la CIA, porque es una buena señal. Si uno logra mantenerse el tiempo suficiente, las cosas se pueden volver a dar.

Aunque uno sienta que Kevin Costner siempre fue famoso en Hollywood, en realidad empezó trabajando en películas independientes, subiendo gradualmente en la escalera de la fama. Su primera película importante había sido la comedia ‘Fandango’ y se convirtió en una de las superestrellas del cine con superéxitos como Wyatt Earp, JFK o Los intocables.

Como uno de los actores más poderosos de su generación, parecía imposible asociarlo con un fracaso, pero los estudios no lo perdonaron cuando gastó 175 millones de dólares en la película Waterworld que ni siquiera recaudó 90 millones en Estados Unidos (la esposa, Cindy, tampoco lo perdonó durante aquella misma filmación, por un supuesto engaño que los llevó al divorcio del 12 de Diciembre de 1994). El gusto de Kevin Costner dejó de ser comercial cuando siguió perdiendo millones de dólares con sus siguientes películas que apenas recaudaron 100 millones de dólares con un costo total de 240 millones. Liberándose de las cámaras, Kevin Costner se refugió también en la música, como el cantante y guitarrista de la banda Modern West que hace poco grabó el album ‘Famosos por Matarnos Entre Nosotros’ o ‘Famous For Killing Each Other, además de dedicarle tiempo a sus seis hijos (tres con su primera esposa Cindy y otros tres, con la actual esposa Christine Baumgartner). Ahora, parece haber encontrado el camino de vuelta al éxito del cine, aceptando personajes secundarios importantes como el padre del nuevo Superman o el gran responsable de convertir a Chris Pine en la versión norteamericana de James Bond, en la película ‘Jack Ryan: Operación Sombra’.

- ¿En un mundo del cine donde tan pocas películas sobreviven el primer fin de semana de estreno, por qué cree que un personaje como Jack Ryan logró sobrevivir más de 20 años en Hollywood?

- Para empezar, el autor Tom Clancy es muy bueno. Y cuando alguien escribe con un estilo clásico, el trabajo puede perdurar con el tiempo. Los trabajos de los escritores que no lo hacen, desaparecen con el tiempo. Estoy seguro que en un principio, a Clancy lo deben haber tomado como un novelista de verano, pero mantuvo la calidad y te demuestra que lo bueno se mantiene en el tiempo. El mundo siempre está en peligro y creo que él encontró la forma de capturarlo en un contexto inteligente. Además, pienso que todavía nos encanta quedarnos a oscuras por dos horas con historias así y las películas de Clancy funcionan muy bien en el cine, en comparación con otros libros.

- ¿A nivel personal alguna vez se puso a escribir un libro que sus hijos puedan leer en el futuro?

- Sí. Y creo que todo el trabajo que hacemos, algún día será examinado por nuestros hijos. Tu propia historia, será examinada por tus hijos. Lo bueno de escribir es que se puede hacer en casa. Y ahora mismo, estoy escribiendo una gran aventura de cinco volúmenes y estoy seguro que serán las mejores novelas de aventuras del siglo. Realmente lo creo. Pienso igual que Julio Verne. Se llama The Explorer’s Guild. Tampoco es algo que escribí por completo, pero participé en la historia con la que estamos trabajando desde hace tres años. Y espero que pueda ser una de las primera animaciones de un libro donde el mundo entero pueda leer al mismo tiempo. Es una serie de cinco libros y cada uno tiene 600 páginas. Es algo bastante comercial. También escribí ciertas historias contemporarias que quiero hacer, como la próxima película sobre la Segunda Guerra Mundial. ¿La voy a hacer? Seguro. ¿Cuándo? No lo sé. Al menos sé lo que quiero hacer, porque escribir es demasiado difícil para mi.

- ¿Por qué?

- Porque enseguida te das cuenta si no es algo bueno (Risas).

- ¿Piensa volver a dirigir cine o es suficiente con el Oscar que ganó en Bailando con lobos?

- Me gustaría jugar la segunda parte de mi carrera dirigiendo más cine. Hay muchas películas que quiero hacer, pero soy bastante cabeza dura. Soy un romántico y me cuesta aceptar las pruebas con el público que hacen hoy con las películas convencionales. Sé que así consiguen buena información, pero yo siento que al dirigir una película tengo un secreto en mi bolsillo que no veo la hora de contar. Y no quiero que mi secreto cambie demasiado.

Aunque Jack Ryan: Operación Sombra cuenta el principio de la historia del mismo personaje que ya pasó por cuatro películas y trece libros de Tom Clancy, la nueva película transcurre en la actualidad de Internet (incluyendo Facebook, Instagram y Twitter). Y en medio de un mundo más moderno, muestran como Kevin Costner recluta en la CIA al estudiante Jack Ryan, que se caracteriza por ser un espía, sin el típico entrenamiento asesino ni los ‘gadgets’ de James Bond. Y el nuevo protagonista Chris Pine es uno de sus admiradores «Se genera un clima diferente cuando una estrella tan grande como Kevin entra al estudio» asegura Chris «Trabajar con él fue como tener una mini clase maestra. Su personaje es el ancla más importante de Jack Ryan», recordándole constántemente quien realmente es y por qué lo eligió. El agregado de lujo: la dirección de Kenneth Branagh que además se presenta como el típico villano ruso, en medio del clásico enfrentamiento entre las dos potencias mundiales donde los malos, claro, siempre son los rusos.

- ¿Qué opina sobre las estrellas de cine más jóvenes como Chris Pine?

- Chris me parece un actor bastante pulido. Yo ni siquiera pude ganarme la vida como actor hasta los 28 años y Chris ya amasó suficiente crédito como para merecer el éxito. Es una estrella de cine clásica, aunque a veces suena aburrido cuando se usa la palabra clásica. Pero a él se lo ve muy elegante en la pantalla. Es un placer estar con él en un estudio, se interesa por todos los componentes que lo van a mejorar como actor. Y yo siento que Chris tiene muchos más conocimientos de los que yo tuve en el mismo momento. Fue una buena elección para esta película y él será el que tenga que tomar buenas decisiones, en el futuro. Me gusta personalmente, más allá de la historia del cine.

- ¿Como actor y director le prestó más atención al trabajo de Kennneth Branagh que dirigió y actuó en la película de Jack Ryan?

- Sí, es algo que siempre me interesa. Hasta que tuvimos el cine, cuando hacías el amor, no sabías si lo estabas haciendo bien, hasta que viste a otro haciéndolo (Ríe). La verdad, no sabías si realmente lo hacías bien... Y yo no sé como dirige otra persona, hasta que veo su estilo. Kenneth es muy importante en nuestro negocio, porque logró que la gente quiera ver Shakespeare. Parece algo fácil, pero no lo es. Los dos empezamos en la misma época y me acuerdo cuando él vino a mi casa, a cenar con Emma Thompson. Era mi primera casa de 80.000 dólares y los había invitado porque yo recién había arreglado el jardín... Recién empezábamos y yo sabía que él era muy importante. Fue un placer verlo trabajar, así como fue un placer recibir la llamada por teléfono cuando quiso que estuviera en esa película.

- ¿Y con respecto al personaje del villano ruso que interpreta Kenneth Branagh? ¿Nunca se cruzó con algún ruso preguntando por qué los eligen siempre como los malos de las películas en Hollywood?

- Yo toqué con mi banda en Rusia, en Moscú. Estuve en la casa de Putin, pero también pasé por cafés donde la gente fue muy buena conmigo. Y gracias a Dios, las fronteras están desapareciendo, es una buena señal en el mundo, porque todos llevamos la misma sangre. ¿Por qué Rusia? Es un oponente que vale la pena en el cine. Las buenas películas no tienen villanos fáciles, el malo tiene que ser muy bueno. Pero lo malo es que la gente crea que es verdad, porque por las experiencias que yo tuve en Rusia, la gente no es para nada diferente. La política es el único tema que se mete en el medio. Yo mismo me acuerdo cuando de jovencito a lo mejor no tenía ciertos amigos porque a mis padres no les gustaban sus padres. Parece una analogía muy simple, pero cuando los padres no estaban, descubrimos que teníamos mucho en común. Y mejor que encontremos una forma de unir el mundo para mejorar. Fijate que podemos ir a cualquier parte del mundo en diez o quince horas. Es posible con la tecnología actual, pero lo curioso es que no podamos ir a ciertas partes del mundo. Me encantaría ir a la Mesopotamia, a Bagdad, pero está fuera de los límites para nosotros. Me encantaría ver lo que pasa en Corea del Norte, pero para nosotros está fuera de los límites. Igual con Africa donde se supone que venimos todos, pero hay que tener cuidado. Es triste. Pero te das cuenta que hay malos en la vida real. Y a veces, en el cine, tenemos que inventarlos, aunque sea desafortunado que solo sean los rusos porque hay más la locura en el Medio Oriente. Al menos, en nuestra película tratamos de no mostrarlos como bufones.

- ¿Pero se da cuenta que hay gente fuera de Estados Unidos que piensa que los norteamericanos son los villanos?

- Yo soy muy patriota pero tampoco ignoro la historia de mi país y su participación en los eventos mundiales. Me he cruzado con gente, incluso periodistas en conferencias de prensa que tratan de hacerme decir algo que tiene el efecto exactamente opuesto conmigo, porque no voy a basurear a mi país. Solo tengo elogios para mi país. Hablamos de Putin, pero es difícil manejar un país, es difícil gobernar. Lo más difícil de conseguir, incluso en mi propio país es la buena información. Porque cuando tenemos dos personas que se postulan como Presidente, dicen exactamente lo opuesto y practicamente dicen que el otro miente. Gente inteligente, los dos tienen una forma diferente de la misma historia. Todos tenemos que ser como Salomon, tratando de saber quien tiene razón. Y es terrible. Me encantaría que eso cambie. Por supuesto conozco los errores de Estados Unidos, pero estoy orgulloso de todo lo que hemos logrado, de verdad.