Las diez claves sobre la marea negra del Golfo de México

¿Qué ha pasado?

El 20 de abril explota la plataforma «Deepwater Horizon». Dos días después se hunde a más de 1.500 metros de profundidad. Y cinco más tardó el crudo en comienzar a manar al mar: 1.000 barriles diarios (entre 160.000-190.000 litros), según las estimaciones iniciales.

¿Dónde estaba situada la plataforma? ¿Quién la explotaba?

«Deepwater Horizon», extraía petróleo para British Petroleum (BP) frente a la costa de Luisiana (EE.UU.), en el Golfo de México.

¿Qué provocó la explosión?

Aún se desconocen las causas: pudo deberse a un aumento inesperado de la presión de salida del petróleo.

¿Algún herido?

En el momento de la explosión se encontraban en la plataforma 126 personas: 98 fueron trasladadas a tierra a salvo, 17 tuvieron que ser atendidas en varios centros hospitalarios de la zona de heridas de diversa gravedad y 11 desaparecieron. La Guardia Costera estadounidense suspendió su búsqueda tres días después. Se les ha dado por muertos.

¿Y entre la fauna?

El pelícano marrón anida en las islas cercanas a la costa de Luisiana y se alimenta allí. Acaba de comenzar su época de reproducción. Varias especies de tortugas marinas atraviesan en estas fechas el Golfo de México. Es el inicio de la temporada de anidación. El norte del Golfo es un sitio crucial para el desove de la población del Atlántico del atún rojo, una especie en peligro crítico. También es el hogar de ballenas, delfines y, sobre todo, marisco: en ella, se pescan el 50% de la producción de gambas salvajes, el 35% de los cangrejos azules y el 40% de las ostras de todo Estados Unidos.

¿A río revuelto ganancia de pescadores?

Colectivos de pescadores de Luisiana han presentado en una corte federal de Nueva Orleans una demanda colectiva contra la petrolera BP en la que solicitan una compensación mínima de cinco millones de dólares.

Los senadores demócratas Robert Menéndez, Frank Lautenberg y Bill Nelson lamentaron la decisión adoptada por Barack Obama el 31 de marzo de poner fin a la moratoria de extraer hidrocarburos en zonas marinas próximas a las costas de EE.UU., que llevaba vigente dos décadas. La Casa Blanca ha dado por muerta, también, y hasta nuevo aviso, la autorización de perforar en el litoral norteamericano.

Los inversionistas de BP están cada vez más preocupados por el impacto del derrame. Desde que la plataforma de perforación «Deepwater Horizon» se incendió, las acciones de la compañía han caído alrededor de 11%, reduciendo su capitalización de mercado en unos 20.000 millones de dólares.

¿Cómo han actuado BP y las autoridades estadounidenses?

Cuatro robots submarinos, 50 barcos, varias aeronaves, más de 1.000 personas se esforzaron, sin éxito, en detener la fuga inicial. Pero a esa, se sumó otra. Los 1.000 barriles de crudo vertidos al día al Atlántico pasaron a ser 5.000. El plan B: quemar el combustible según salía. Una opción también perjudicial para el medio ambiente, pues contamina la atmósfera. Sin embargo, EE.UU. decidió llevar a cabo los incendios controlados de las trazas de petróleo reunidas la medianoche del 29 de abril (hora española).

Barack Obama ha anunciado la movilización de dieciséis agencias federales y de todos los recursos de su Administración, incluido el Ejército. Se ha puesto en marcha una investigación exhaustiva. Los responsables de la misma tendrán competencias para emitir citaciones, celebrar audiencias públicas y exigir la comparecencia de testigos.

¿Cómo se llevó a cabo la quema del fuel?

Varias embarcaciones reunieron los segmentos dispersos de la mancha, los introdujeron dentro de una especie de corral construido con material ignífugo y lo condujeron hasta una zona remota en alta mar, donde comenzó a prenderse fuego al vertido.

¿Cómo es la mancha?

Ha ido ganando extensión con el paso de los días, empezó pareciéndose a la isla de Jamaica (11.000 kilómetros cuadrados de superficie). Y ahora todos dicen que ocupa lo mismo que el estado de Virginia Occidental (63.000 kilómetros cuadrados). El responsable de comunicación de BP, Andre Gowers, ha comparado la consistencia de la mancha con la del «té helado» y su grosor con el de un cabello humano.

¿Podría repetirse el desastre del buque petrolero Exxon Valdez (1989, más de 40 millones de litros de crudo vertidos frente a las costas de Alaska) con consecuencias medioambientales que aún se investigan?

«Si no cerramos el pozo, constituirá una de las peores mareas negras de la historia de EE.UU.», señaló la portavoz de la Guardia Costera, Mary Laundry. Al poco, las autoridades estadounidenses declaraban al vertido «desastre nacional». La edición online de The Guardian menciona hoy que «en la city londinense los rumores hablan de 10.000 barriles de petróleo vertidos al Atlántico», el doble de las cifras barajadas ahora.