La compra de segunda mano: modelo responsable y sostenible

La pandemia ha fortalecido este mercado: « Hemos observado un incremento significativo respecto a 2020 de aquellos que declaran haber comprado productos de segunda mano en el último año: uno de cada tres consumidores compra productos de este tipo más que antes de la pandemia, especialmente los millennials», señala Olivia Calafat, directora de marketing de Wallapop. ¿Las motivaciones? para un 65% de los encuesta- dos, el aspecto mejor valorado del consumo de segunda mano es la sostenibilidad, y hasta un 57% admite que dar una segunda vida a los objetos les hace sentirse mejor consigo mismos.

Los resultados de «La Red del Cambio» señalan que e ntre las principales motivaciones para comprar y vender de segunda mano, además de reducir gastos (46%), se encuentran la reducción de residuos (39%), alargar la vida de lo productos (36%) o apoyar la economía local (12%). El estudio apunta que hábitos como el ahorro, evitar el gasto in-necesario, el consumo de proximidad, el reciclaje y la reducción de residuos y plásticos seguirán consolidándose en un futuro próximo. No en vano, casi siete de cada diez reconoce que antes de comprar algo piensa si realmente lo necesita, con el objetivo de alargar la vida de los productos.

La moda, los productos para el hogar, los artículos para niños y bebés o el ocio han sido algunas de las categorías más populares en el último año. El gasto medio del consumidor en el mercado de segunda mano osciló entre los 70 y los 225 € en el último año, a excepción de la categoría motor, donde el gasto, como cabe esperar, fue superior a los 4.000 €. Por su parte, el beneficio obtenido de la venta de artículos de segunda mano es idéntico y paralelo al gasto, en este caso con una mayor salida de los productos relacionados con moda.

No en vano, el estigma hacia las prendas de segunda mano está desapareciendo: los españoles compran ropa de segunda mano un 19% más que antes de la pandemia y un 25% más reconoce que lo hará en los próximos cinco años. Tres de cada diez españoles aseguran haber comprado moda de segunda mano en el último año y casi cuatro de cada diez han vendido en esta categoría.

Además, esta tendencia al cambio se ve también reflejada en la toma de decisiones: el 68% reconoce que la sostenibilidad de un producto afecta directamente a su decisión de compra . Un 26% de los españoles gastará más dinero que ahora en moda de segunda mano en los próximos cinco años y un 24% en moda sostenible. Mientras que uno de cada seis asegura que comprará más ropa de segunda mano que nueva.

Esta tendencia es impulsada por la Generación Z, la más concienciada con la sostenibilidad del planeta: el 83% de los jóvenes entre 16 y 25 años compra segunda mano más o igual que antes de la pandemia. Según este estudio, los jóvenes prevén gastar más en ropa usada y más en moda sostenible. Tienen adquiridas buenas prácticas y sus propuestas para fomentar el consumo sostenible se centran en ofrecer más información, encarecer los productos no sostenibles y promover el consumo de segunda mano. Además, están convencidos de que todos los individuos, instituciones y empresas son corresponsables de asegurar el bienestar del planeta.

Existen muchas oportunidades para apostar por la moda sostenible. Según otro estudio de Wallapop, el 93% de los españoles da una segunda vida a los artículos que ya no necesita con el cambio de estación, ya sea vendiéndolos en plataformas de segunda mano, regalándolos o donándolos. La mayoría afirma que renueva su armario cuando llega una nueva estación. De estas compras, casi la mitad de los encuestados afirma haber acudido al mercado de segunda mano para adquirir ropa o calzado acorde con la temporada.

Como plataforma líder en el consumo responsable y sostenible entre personas, Wallapop destaca como gran facilitador para el mercado de segunda mano : el 83% de los consumidores conoce la plataforma, y los valores que le atribuyen son la reducción de residuos, la promoción de la economía colaborativa y el fomento de hábitos de compra sostenible. Y es que, como mencionan en su última campaña, no solo importa el precio, sino a qué precio.