El calor que nos da el bosque

La biomasa (materia orgánica variada que incluye la madera) supone una energía fundamental para España, reconocen desde el COIM: «Es la que más empleo y riqueza genera en el medio rural, la que más residuos valoriza y la que más emisiones de CO2 evita».

«España –afirma Del Álamo- tiene un gran potencial en biomasa, con una masa forestal que aumenta cada año a pesar de los grandes incendios de los últimos veranos».

Según un informe realizado por se espera que la demanda global de biomasa crezca a un ritmo anual del 9% hasta 2020, año en que se cree que este tipo de energía pueda competir sin la necesidad de subsidios gubernamentales.

«La tendencia es clara: en el año 2000 se generaron 2 millones de toneladas de biomasa; en 2010, 15 millones de toneladas; para el año 2020 hay una previsión de más de 46 millones de toneladas de biomasa producidos», destaca Del Álamo.

El decano del COIM pide el apoyo de la Administración. «Con una inversión igual a la realizada por el PLAN E, es decir, 11.000 millones de euros, se podría actuar sobre 4.565.000 hectáreas mediante la repoblación o trabajos selvícolas de mantenimiento, originando más de 300.000 empleos estables, sobre todo en zonas rurales».

Sin embargo, «el RD 2/2013 (pdf) que acaba de entrar en vigor afecta de manera negativa a las energías renovables, un sector que podría ser estratégico para el crecimiento de nuestra economía», se queja Del Álamo.

«España ocupa el tercer puesto a nivel europeo en cuanto a biomasa se refiere. El uso de la biomasa reduce el riesgo de incendios forestales, ayuda al equilibrio ambiental del país y facilita el desarrollo rural en áreas que estaban práctica o totalmente abandonadas. Tenemos que pensar en positivo y beneficiarnos de una riqueza y tecnología que está ahí para que la aprovechemos con responsabilidad», concluye el ingeniero de Montes.