2013: Un buen año para el urogallo

Durante la reciente reunión semestral del Comité de Gestión del programa Life+Urogallo cantábrico se han analizado los anteriores resultados, obtenidos a lo largo de 2013. Y se ha avanzado en las iniciativas a emprender para salvaguardar a la subespecie durante 2014.

El proyecto Life+ Urogallo cantábrico actúa sobre el estrato arbóreo y arbustivo en el área oriental de la cordillera Cantábrica, en las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) Liébana, Sierras del Cordel y cabeceras del Saja y del Nansa (Cantabria) y Picos de Europa (León). En la actualidad, se está trabajando en el área occidental de la cordillera Cantábrica, en las ZEPAs de Omaña y de Alto Sil (León).

A lo largo de 2013, se han firmado 12 nuevos acuerdos con propietarios de fincas del entorno que ocupa el urogallo cantábrico a través del programa de custodia del territorio y el impulso de los usos tradicionales .

Además, se ha comenzado la negociación para la corrección de la subestación eléctrica de Collado La Vieja.

«Se ha solicitado a la Comisión Europea una prórroga hasta el 31 de diciembre de 2016 para facilitar el cumplimiento de los ambiciosos objetivos del proyecto Life+ Urogallo», explica Ester Carlomagno.

Desde el comienzo del plan de cría en cautividad , lanzado en el centro de Sobrescobio (Asturias) en 2007, han nacido 32 pollos , de los que han logrado sobrevivir 12 (un 37,5%), una supervivencia superior a la natural.

Para incrementar los ratios de supervivencia y revisar los protocolos, se ha acordado reunir a un grupo de expertos en cría de aves en cautividad. Además, continúan las acciones destinadas a elevar el plantel de individuos reproductores del centro. Para ello, se han radiomarcado tres hembras para su seguimiento.

Durante el último trimestre de 2013 se están redistribuyendo cinco ejemplares de urogallo cantábrico de Sobrescobio entre otros dos centros, el de Recuperación de Fauna Silvestre del Gobierno de Cantabria y el de Recuperación de Animales Silvestres de la Junta de Castilla y León en Burgos, para disminuir los riesgos de epizootias (enfermedades contagiosas que se propagan con rapidez entre un número alto de animales al mismo tiempo).