El día tenía que llegar. La suerte ha sido esquiva con España en el Mundial de Brasil 2014 y ha sido eliminada después de perder dos partidos seguidos, algo que no pasaba desde el año 2006, cuando la selección peleaba por clasificarse para la Eurocopa de Austria y Suiza con Luis Aragonés en el banquillo.
España cayó derrotada con Irlanda del Norte (2-3) el 6 de septiembre de 2006. Fue algo que no se esperaba nadie, una derrota contra todo pronóstico que dolió mucho a la selección, tanto que ante Suecia, un mes después, los hombres de Luis Aragonés volvían a caer.
A partir de ese momento, con todos los cambios que el «Sabio de Hortaleza» en la selección –incluyendo la salida de Raúl– España empezó un ciclo de ocho años ganadores en los que las derrotas se consideraban meros accidentes.
Sin embargo, en Brasil las cosas han sido diferentes. La sonrojante goleada de Holanda precedió a la derrota ante Chile en la segunda jornada, cuando España necesitaba, por lo menos, un punto para seguir viva en el Mundial, aunque solo la victoria le podía dar opciones reales para estar en octavos.






