El truco con el que te ahorrarás desvíos innecesarios de la autovía al buscar una gasolinera

Probablemente, la mayoría de conductores pararán en una gasolinera o área de servicio para descansar, como aconseja la DGT, o para repostar. Una de las situaciones que más fastidia a los conductores es encontrase con que la estación de servicio no está tan cerca como parece. Aunque ahora ya casi todos recurren a la ayuda de los navegadores, que se pueden configurar para este fin. Si estos fallan, hay un truco para solucionar este problema.

Es el momento en el que se sale de la autovía y se comprueba cómo se avanza sin señales de que cerca haya ningún sitio para poner gasolina. Se puede llegar a recorrer un par de kilómetros cuando, al fin, aparece el ansiado lugar, algo que se agradece especialmente cuando se ha tenido que parar por alguna urgencia.

Sin embargo, algo que no todos saben es que en la autovía los carteles ya han advertido de cómo de lejos va a estar. El truco está en el color de los carteles.

Si la señal es azul, es decir, del mismo color con el que señaliza la autovía, quiere decir que la gasolinera está situada en el lateral y por lo tanto el conductor podrá hacer la parada sin desviarse.

En cambio, si el color de la señal es verde, quiere decir que la estación de servicio se sitúa en las inmediaciones de la carretera, pero no necesariamente cerca. Por último, si el color es blanco significa que directamente habrá que continuar por una carretera convencional hasta llegar a ella.

No obstante, la mayoría de gasolineras que están cerca de la autovía son perfectamente localizables. Si aún hay dudas sobre cuál es la estación de servicio más cercana hay que fijarse en los metros.

Si están señalizadas a 1.000 o 500 metros estará al lado de la carretera principal, mientras que si están señalizadas a 700 o 250 metros se ubicará en una carretera secundaria.