Ramón Bosch, Anesdor: «Una motocicleta hoy emite menos que un coche híbrido»

¿Qué ha significado 2021 en el sector?

Si nos comparamos con 2019 el mercado está todavía un poco por debajo de cifras prepandemia, pero la tendencia es a seguir creciendo y superar esos datos. Ha sido un año que esperábamos ciertos cambios, sobre todo a nivel de etiquetas medioambientales. Están desarrolladas para la automoción, indican si un vehículo poluciona más y qué vehículos menos, y una moto hoy emite menos que un coche híbrido; es decir, tenemos motos que son mucho más eficientes y están consideradas con una etiqueta peor. Y a partir de 2023, las ciudades de más de 50.000 habitantes van a tener que poner su normativa de emisiones, y nos vamos a encontrar con vehículos tan eficientes como son las motocicletas que no podrán entrar según en qué ciudad, y otros vehículos no tan eficientes, al tener una etiqueta distinta sí que podrán acceder. Por lo tanto, esto es una tarea pendiente por parte del Gobierno que esperábamos que este año 2021 hubiera quedado solucionado y al final se ha pospuesto hasta la siguiente legislatura.

¿Cuánto durará la crisis de los semiconductores?

En el 2022 vamos a seguir con problemas a nivel general. No solo a nivel de semiconductores, si no de la falta de mucha materia prima y el aumento de la logística a nivel de costes y tiempos. Estos ha cambiado y lo dificulta todo. Pero esperemos que para finales de 2022, es decir, en el segundo semestre, esté la cosa bastante solucionada o por lo menos clara, que al final si la producción es el 80 o el 90% de lo previsto, que sean cifras más o menos claras. Aunque este año va a seguir siendo complicado seguro.

Indican que en 2021 hubo un descenso del 45% de motoristas fallecidos en las carreteras en comparación con 2019, ¿En qué se ha mejorado y cómo seguir con esa tendencia?

A nivel de fabricantes hemos invertido muchísimas horas y dinero en mejorar la seguridad de nuestros vehículos, y una motocicleta en la actualidad comparada con una de hace 10 o 15 años, ha mejorado muchísimo; y esto ha contribuido a esta reducción de la siniestralidad. También esperamos que con las medidas en las que trabajamos con la Dirección General de Tráfico (DGT), concienciación y, sobre todo, formación vial a todos los niveles, mejore. La formación es imprescindible no solo cuando te acabas de sacar el carné, si no quien lleva 20 o 30 años conduciendo con carné de moto, hay que reciclarse. Lo vemos como algo muy positivo. El principal problema lo tenemos en que la moto más vendida en 2021 es una de segunda mano de 10 años, y esto a nivel de seguridad, de polución, de emisiones... no tiene nada que ver un vehículo de 10 años con uno nuevo.

La edad media del parque de motos está ya en 16 años

Y no se está fomentando su renovación de ninguna manera. Se debería ajustar a nivel impositivo como en toda Europa. En Francia, por ejemplo, tienen un impuesto de CO2 parecido al de aquí, pero los valores son diferentes. Por una moto en España puedes estar pagando 1.200 euros en impuestos, que no es poco, mientras que allí pagan 120, una cifra relativamente asumible. Eso facilitaría la renovación de vehículos nuevos.

¿Qué papel jugarán las motos en la nueva movilidad?

Va a jugar un papel importantísimo. En una gran ciudad el vehículo individual perfecto para moverte es la motocicleta, que además, si es eléctrica, te cubre perfectamente el rango de kilómetros que necesitas día a día. Hemos visto durante estos dos años con la pandemia que muchos ciudadanos han decidido que su vehículo para su transporte individual y diario sea la motocicleta porque lo ve seguro, rápido y eficiente. También recordar que con una moto el tiempo de ir de A a B es mucho menor que en cualquier otro tipo de vehículo, lo que, además, permite que estés mucho menos tiempo polucionando.