Ya es posible evitar el frío en moto

Lleva algún elemento reflectante para ser visto a pesar de las típicas nieblas pucelanas . No hay que olvidar que las motos son menos visibles que los coches por su menor tamaño y que en general no llevan luces antiniebla. No solo importa ser visto, sino también ver. Si tu casco no tiene una pantalla anti-vaho puedes pegarle una lámina especial o aplicar un spray que evite que se empañe. No olvides cerrar las entradas de aire.

Usa sotoguantes y calcetines térmicos. Las manos y los pies son las partes del cuerpo que más se enfrían en la moto y puede ser peligroso perder sensibilidad. Un truco de emergencia es ponerte unas bolsas de plástico fino en los pies y guantes del mismo material en las manos. Puedes incluso parar en una gasolinera y coger los guantes que ofrecen para echar gasolina. De paso, si estás en ruta y se te ha metido el frío en el cuerpo, ve al baño y utiliza los secadores de manos para calentar los guantes, el interior del casco y la cazadora. Te ayudará mucho a entrar en calor.

Asimismo, lo ideal es llevar cubremanetas o puños térmicos para que la mano no se lleve la peor parte del viento . Si no es tu caso, puedes fabricarte unas cubremanetas recortando unas garrafas de plástico a la mitad y ajustándolas a la moto con cinta aislante. Si aun así tus manos no entran en calor puedes usar calientamanos o bolsas de calor instantáneo, unos dispositivos baratos y pequeños que se calientan instantáneamente al presionarlos o doblarlos.

No olvides tampoco llevar un buen cuello y camiseta y pantalón térmico bajo la ropa. Si no te da tiempo a comprarlo un remedio casero es forrar el pecho con papel de periódico. También puedes utilizar el mono o pantalón de lluvia aunque no vaya a llover porque cumplirá doble función: hará de cortavientos y te protegerá de la humedad de la niebla.

Muchos motoristas con la llegada de los meses de invierno, con la lluvia, el viento y el frío como protagonistas, dejan su vehículo de dos ruedas aparcado. La facilidad en la circulación pasa a un segundo plano y se prioriza evitar la incomodidad de luchar contra los elementos. Algo que puede atajarse con el equipamiento correcto, tal y como recuerdan desde el blog de Mutua Madrileña .

La bajada de las temperaturas es el principal causante, pero, aunque las temperaturas ambientales no sean tan bajas, el resultado de la suma de los grados de la temperatura ambiente y la velocidad del aire adquirida en la moto son las dos incógnitas de la ecuación responsables de producir que la sensación térmica de nuestro cuerpo en la moto sea de menos grados . Para evitar el frío es importante llevar debajo de nuestro casco, o bien un sotocasco térmico o bien un pasamontaña. Además, es recomendable equiparse con dos bragas del cuello, una interna (fina) y otra externa (térmica), colocadas por debajo de la mentonera del casco para que el frío no entre por ninguna hendidura.

Por otro lado, aunque muchos moteros piensan que la cabeza es la fuente principal de escape de calor, en realidad, es por nuestro pecho, debido a que existe una mayor superficie donde se concentra el frío. Por ello, para protegerlo, debemos hacerlo con una buena cazadora de moto de invierno y, en el caso de prescindir de ella, podemos recurrir a una chaqueta de esquí o a un chubasquero con sus correspondientes capas de ropa térmica de deporte. De esta manera, poco a poco los moteros ven como pueden disfrutar de su vehículo en cualquier época del año en las mejores condiciones.