«En España hay que llamar a ocho ventanillas para poder instalar un punto de carga eléctrico»

En la presentación esta mañana del modelo, que por primera vez se puede contemplar en España, la directora general de Volkswagen España, Laura Ros , ha destacado que «llega en el momento oportuno, ya que 2020 marca un "punto de inflexión para el despegue de los eléctricos en España».

La sombra del «Dieselgate» ha llegado hasta nuestros días , pero con la nueva gama de coches eléctricos Volkswagen quiere dar pruebas de cómo se puede rectificar y «empezar en este 2020 con una era de movilidad con emisiones neutras de CO2, haciendo además que otros fabricantes se unan a nosotros hasta llegar a un año 2040 en el que dejaremos de vencer coches de combustión», asevera Bagschik.

El reto está en consonancia con la propia evolución de la sociedad, que «está cambiando rápidamente». Por eso el ID.3 es tan solo en primer miembro de una familia de vehículos electrificados que «contará con un vehículo en cada uno de los segmentos».

Este vehículo ofrece ya autonomías de 330, 420 y 550 kilómetros reales. Pero al mismo tiempo que el número de kilómetros que se pueden recorrer con un coche eléctrico dejan de ser in obstáculo insalvable, se va avanzando en pasos para conseguir que la recarga deje de ser una preocupación para el conductor de un coche eléctrico.

Según los estudios con los que cuentan en Volkswagen , el 50% de las cargas se realizan en el propio domicilio , el 30 % en el centro de trabajo, el 15% en puntos de recarga pública, y tan solo el 5% en los puntos de recarga instalados en autopistas. Y en realidad, según la responsable mundial de ventas de eléctricos de Volkswagen «hacemos menos kilómetros de los que realmente pensamos , por lo que poco a poco los usuarios se darán cuenta que con la oferta actual de modelos eléctricos es posible una movilidad diaria sin tener preocupaciones».

Además de los factores económicos a la hora de comprar un coche eléctrico, el factor emocional sigue siendo muy importante. Y en este sentido Silke Bagschik asegura que el ID.3 también posee ese factor emocional «que se nota a la hora de acceder a una tecnología puntera, a la hora de sentarte en el coche , conducir y no notar ruidos ni vibraciones, comprobar que la conducción de un coche es muy fácil, y que no dependes de ir a repostar a una gasolinera porque puedes cargar el coche en tu propia casa, sin olvidar que las sociedad está cambiando su percepción y un coche eléctrico te hace sentir que estás contribuyendo a frenar el cambio climático».

Frente al resto de paises europeos, las ventas de coches eléctricos en España no despegan representando poco más del 1% del mercado. Es algo que preocupa a Laura Ros, Directora General de Volkswagen en España. Pese a ello la marca quiere asumir el liderazgo de la transformación hacia la movilidad eléctrica «tal y como en su día el Escarabajo se convirtió en el coche del pueblo, seguido por el Golf, y ahora esperamos que también con el ID.3 », asegura.

Para Ros, este año debería registrarse un incremento muy importante en las ventas de vehículos eléctricos en España. La mayor oferta de modelos con esta tecnología, el incremento de la autonomía de las baterías y una expansión de la red de infraestructuras de recarga ayudarán a impulsar este mercado.

Pero no faltan trabas, porque pese a que la mayor parte de las carga de coches eléctricos se realicen en el propio domicilio, es importante disponer de una red de puntos públicos a los que acudir, sobre todo cuando se habla de realizar desplazamientos en carretera. Así, mientas la red de recarga rápida Ionity, de la que Volkswagen forma parte, tiene ya una importante implantación en Europa, en España en la actualidad solo cuenta con dos puntos activos. «Ionity se está atascando en España, porque para instalar aquí un punto de recarga hay que llamar a siete u ocho ventanillas de diferentes administraciones, con lo que se van acumulando retrasos».

Además la directiva española considera que hacen falta planes de ayudas por lo menos al mismo nivel que el resto de paises europeos. Y no solo para la adquisición de vehículos eléctricos o de bajas emisiones, por que, según Ros «existen otras propuestas como la de eliminar el pago del IVA por la adquisición de un coche eléctrico, mejorando las infraestructuras apra que haya más puntos de carga por número de habitantes, o ofreciendo bonificaciones en el IRPF a los profesionales que se decidan a dar el aso a la movilidad eléctrica».

Desde Volkswagen Laura Ros asegura que se está intentando «democratizar el acceso a la movilidad eléctrica, y por ello el nuevo ID.3, que llegará a los concesionarios este verano, tiene un precio de partida por debajo de la barrera psicológica de los 30.000 euros ».

El reto del fabricante es ahora «convertir al ID.3 en el tercer icono de la marca. Si en los años 50 el Beetle ayudó a democratizar la movilidad de la clase media y, en los años 70, el Golf hizo accesibles en un modelo de volumen tecnologías que hasta entonces estaban reservadas al segmento Premium, con el ID.3 aspiramos a democratizar la movilidad eléctrica », afirma Laura Ros.

El Grupo Volkswagen ha aprobado una inversión de 33.000 millones de euros hasta el año 2024 para el desarrollo de la electromovilidad. De esta cifra, 11.000 millones de euros se destinarán únicamente a la marca Volkswagen.

Según las últimas actualizaciones de la marca, se espera que el objetivo estratégico de producción de un millón de coches eléctricos al año se alcance en 2023, dos años antes de lo previsto . Volkswagen espera fabricar 1,5 millones de vehículos de la nueva gama ID. en 2025.