Toyota Land Cruiser e Hilux 2018: sus capacidades todoterreno a prueba

La base de las cualidades «off-road» del Land Cruiser, cuya última actualización ya se comercializa en España, es su carrocería sobre bastidor. A diferencia de los turismos normales y de los SUV, que emplean una carrocería monocasco o autoportante, esta opción que le dota de una gran robustez en situaciones de torsión extremas, como al circular sobre firmes irregulares, como baches o badenes de campo en los que alguna rueda puede quedar en el aire.

Además, el nuevo Land Cruiser refuerza sus cualidades fuera de carretera con la incorporación de un nuevo diferencial trasero de deslizamiento limitado (LSD) tipo Torsen , manteniendo el bloqueo de diferencial, la reductora y el control de descensos DAC, que permite afrontar bajadas pronunciadas con solo manejar la dirección, ya que el vehículo se encarga de gestionar la potencia y los frenos. Como curiosidad, este Land Cruiser es, según nos asegura Toyota, el único vehículo del mercado con control de descensos inverso, es decir, que también permite emplear este sistema marcha atrás, una opción que no hemos probado.

Además, se ha ampliado con una nueva opción el Sistema de Selección Multiterreno —Multi-terrain Select System (MTS)—, el modo AUTO, que se suma a los modos Barro y arena, Piedras sueltas, Terreno ondulado, Piedras, y Terreno deslizante. Este nuevo modo se activa automáticamente con la función de Sistema de Avance Activo (Crawl Control) de cinco velocidades diferentes. Por contra, se mantiene sin cambios el propulsor, un potente motor diésel 2.8 D-4D de 177 CV.

Estéticamente, las principales novedades del Land Cruiser 2018 son la parrilla, que se sitúa ligeramente más elevada, los faros, ligeramente más estilizados, y el capó, que incorpora una hendidura central que incrementa la visibilidad. El resto de los cambios notables son la incorporación, como opción, de un nuevo monitor de visión bajo el vehículo para favorecer la visibilidad ante pendientes pronunciadas -dejamos una imagen facilitada por Toyota bajo estas líneas-, la opción de incorporar asientos delanteros ventilados y calefacción y climatización en los traseros, retrovisores exteriores con inclinación inversa y un nuevo diseño de llave inteligente.

La gama se estructura entre dos tipos de carrocería, de tres y cinco puertas, y cinco niveles de equipamiento , dos enfocados a profesionales y flotas —NX, que parte de 36.050 euros, y GX— y tres destinados a cliente particular —VX, VXL y Limited, que se comercializan desde 40.600 euros con carrocería de tres puertas o 44.600 euros con carrocería de cinco puertas, y ascienden a 66.400 euros en el caso de la tope de gama—.

Toyota espera comercializar en total 2.500 unidades este año , y avanza que la versión que más éxito comercial tenga entre particulares sea la VXL con transmisión automática y pack de cuero, que se puede adquirir desde 55.600 € o por 500 € al mes con Pay per Drive, la financiación de pago por uso de Toyota España.

La VXL incluye de serie 7 airbags, cámara de visión trasera, climatizador, control de crucero, llantas de aleación de 19'', parrilla frontal cromada o pomo palanca y tirador freno de mano en piel, bloqueo del diferencial trasero LSD Torsen (5p), Sistema de Suspensión Adaptativa Kinética —Kinetic Dynamic Suspension System (KDSS)—, techo solar y Toyota Safety Sense. Opcionalmente se puede completar con el Pack Cuero: tapicería de cuero, asientos con ventilación y asientos posteriores calefactables.

El tope de gama, Land Cruiser Limited, añade Alerta de Tráfico Cruzado Posterior (RCTA), asiento del conductor con memoria de posición, Detector de Ángulo Muerto (BSM), raíles de sujeción de equipaje en maletero, Sistema de Avance Activo (Crawl Control), sistema de entretenimiento para plazas traseras, Toyota Touch 2 & GO con funciones avanzadas, sistema de reconocimiento de voz con mandos en el volante, Suspensión Variable Adaptativa (AVS), el Sistema de Visión 360º, Sistema de Selección Multiterreno (MTS) y tapicería de piel marrón y negra.

Incluso mejores cualidades que el Land Cruiser ha demostrado la «pick-up» Hilux . Famosa por sobrevivir en el programa «Top Gear» de la BBC al agua de mar, a una bola de demolición y hasta al derribo de un edificio -que vivió desde la azotea del propio edificio-, la Hilux 2018 mantiene sus capacidades por pistas deshechas, pero se «amabiliza» para tratar de seducir a un nuevo público, que pueda verse atraído por este tipo de vehículos tras la reforma que las permite dejar de homologarse como camión y, entre otras cosas, circular por autovía y autopista a 120 kilómetros por hora (antes estaban limitados a 90).

Al igual que el Land Cruiser, la Hilux 2018 se ofrece en cuatro versiones: GX, VX, VXL y Limited, siendo estas dos últimas las más enfocadas a lo que la marca denomina «cliente emocional». Ambas incorporan climatizador automático, y el conjunto de sistemas de seguridad y ayuda a la conducción Toyota Safety Sense, si bien la versión Limited añade entrada y arranque sin llave, faros delanteros de LED, tapicería de cuero y asiento del conductor con ajuste eléctrico. La VXL, por su parte, ofrecerá también sensores de aparcamiento, barras antivuelco y protección inferior en los paragolpes. El precio de esta última parte de los 33.500 euros, aunque puede adquirirse en régimen de alquiler a largo plazo (Pay per Drive) por 300 euros al mes. La Limited, por su parte, asciende a 36.500 euros.

Con estos cambios, Toyota quiere alcanzar este año el 50% de las ventas del segmento de pick-up en España, para lo que deberá comercializar 4.000 unidades de la Hilux .