Renault EZ-PRO: el transporte urbano del futuro será autónomo y con autonomía de 300 kilómetros

Para una entrega comercial flexible y transparente, este modelo cuenta con una plataforma y se compone de robo-pods modulares, hechos a medida y totalmente conectados. Estos pueden albergar productos tanto para operadores de servicios logísticos, empresas de distribución, minoristas y usuarios finales. También permite una solución de envío compartido, destinada a maximizar la productividad de los módulos de transporte operados por transportistas con un potencial de reducción de costos y un tráfico más fluido. Los usuarios finales pueden elegir con precisión dónde, cuándo y cómo entregarse.

La firma francesa cree «que el futuro de la entrega de la última milla aún debe tener un toque humano ». Es por eso que el pod líder autónomo alberga un «conserje», el encargado de las entregas especiales o de comestibles electrónicos. Y, gracias a la tecnología AD, cuando el conserje no está entregando, puede enfocarse en tareas de valor agregado como supervisar los robo-pods de la flota sin conductor -se trata de tres en esta primera visión- u optimizar la ruta de entrega de la flota.

El líder dirige a los robo-pods a sus tareas a través de una pantalla digital que señala el «conserje» para que estos recorran la ciudad según las necesidades solicitadas. Se pueden entregar paquetes grandes, destinados a empresas con fondo y también bultos en celdas, fácilmente accesibles para los usuarios. Y para que su uso no sea una traba para una ciudad limpia, este concept car ha sido diseñado en tonos claros y verdes, incorporando materiales naturales.

El EZ-PRO tiene una misma plataforma autónoma con recarga eléctrica en la que se colocan los diferentes módulos . Incluso dichos módulos se pueden dividir para realizar distintas funciones, por ejemplo, entregar paquetes o crear un «coffee stop». El módulo del conductor cuenta con 6 metros cúbicos y la capacidad del de las mercancías, con 12.

Al estar basado en una plataforma modular, EZ-PRO está abierto a una gran variedad de usos , cumpliendo una amplia variedad de requisitos comerciales específicos. De hecho, se compone de dos componentes diferentes llamados pods: El pod líder alberga un conserje que supervisa la entrega de los bienes y servicios. Los robo-pod (drivers) sin controladores con una configuración modular y completamente personalizable, lo llevan detrás en modo «platooning» o independientemente hasta su punto de entrega.

Para acceder a este servicio, solo necesitas una aplicación móvil . Solicitas tu paquete, el lugar y hora de entrega y, una vez que el pod está en tu localización, simplemente te indica un número de celda, la cual desbloqueas y lo recoges. Una vez aceptada la entrega, el módulo autónomo continúa su trayectoria.

Esta tecnología autónoma se debe gracias a la multitud de sensores capaces de monitorear y analizar el entorno del vehículo: radares, lidares, ultrasonidos y cámaras. De hecho, cuando no estén trabajando, se podrán pasear por la ciudad, sin necesidad de parking. Es más, «se trata de un completo ecosistema, sobre todo, para los empresarios».

EZ-PRO tiene un sistema inalámbrico de recarga de batería para conexión automática sin intervención humana. Carga por tecnología de inducción dinámica, aunque también se pueden enchufar a un supercargador. ¿Cómo funciona? Los sensores debajo de las cápsulas se cargan con placas eléctricas en la carretera. Permite una carga permanente al conducir y, por lo tanto, una gran autonomía de 300 kilómetros WLTP -hoy el ciclo urbano promedio para la entrega es de 80 kilómetros-.

De hecho, las baterías del módulo llegan cargadas a diario a la ciudad, con autonomía suficiente para recorrerla, con la idea de que, cada noche, se recargen y vuelvan a aparecer la jornada siguiente. Y como su uso principal es la entrega de última milla en el área urbana, este modelo no podrá superar los 50 km/h de velocidad en la ciudad, aunque sí consigue una velocidad máxima de 70 km/h bajo la supervisión del conserje y en el modo de «platooning» de los robo-pods.

Finalmente, los modulos se han pensado para contar con un protocolo necesario de comunicación para así reconocer los semáforos en rojo, el tráfico y las vías de tránsito. El primero transmitirá la información en tiempo real a los demás, y así continuamente.