El e-tron abre la era eléctrica de Audi

Audi inicia con el e-tron una nueva era dentro de la marca con un vehículo 100% eléctrico. En San Francisco (EEUU), ante más de 1.500 periodistas de todo el mundo, han presentado el vehículo que marcará el camino por el que irá la marca alemana de los cuatro aros en los próximos años.

Hablamos de un SUV 100% eléctrico con 408 CV de potencia y más de 400 kilómetros de autonomía (homologados según WLTP en conducción real), y que llegara al mercado a finales de este año desde 82.400 euros.

Un vehículo grande, de casi cinco metros de longitud (4901 milímetros), con estética SUV, pero con líneas deportivas, que monta dos motores eléctricos , uno en cada eje de las ruedas, que aportan 300 kW (408 CV). Con estas armas consigue un empuje que le lleva de 0 a 100 km/h en tan solo 5,7 segundos, y lo hace gracias a la repuesta instantánea del motor que logra que la transmisión desde el acelerador a los motores se consiga en 250 milisegundos. Su velocidad máxima está limitada electrónicamente hasta los 200 km/h.

Destaca en el exterior su diseño robusto, con una parrilla frontal de celdas octogonales que conecta con una línea lumínica que integra los faros. Desde las luces delanteras, y prolongándose hacia los flancos del coche, se aprecia una línea de tornado que conecta con los faros traseros. Destaca en la zaga del vehículo el spoiler que le da un aspecto deportivo. El modelo de la oferta de lanzamiento tendrá un color azul Antigua, pero habrá hasta doce tonalidades distintos de carrocería. Las molduras del paso de rueda y en las taloneras laterales tendrán un color de contraste para realzar «la estética off-road», como destaca el diseñador español Juan Carlos Huerta.

En el exterior llama la atención la desaparición de los espejos retrovisores laterales. Han sido sustituidos por unas pequeñas cámaras que captan la imagen y la transmiten a una pantalla de siete pulgadas alojada en el interior de la puerta, justo en la intersección con el salpicadero.

En el diseño del e-tron, los ingenieros han prestado especial atención a la aerodinámica. « Aerodinámica y estética se reparten a un 50% la importancia en el diseño de este modelo », afirma Huerta. Este trabajo para conseguir rebajar al mínimo la resistencia al avance del coche ha repercutido en un aumento de 5 kilómetros en la autonomía del coche y esto gracias a un coeficiente aerodinámico de tan solo el 0,27, muy por debajo de los estándares de un SUV.

Los dos motores del e-tron -uno en cada eje- trabajan de forma independiente. Cuando la velocidad de marcha es moderada sólo actúa el trasero. Tiene además un sistema de recuperación de energía que mejora la eficiencia de la autonomía en un 30%. Lo hace, por un lado, cuando levanta el pie del acelerador -el coche avanza por inercia y recarga las baterías- y por la frenada.

El hecho de llevar un motor en cada eje de las ruedas le permite mejorar el agarre. La nueva tecnología quattro consigue que la tracción en cada uno de los ejes se conecte de forma predictiva en función del estado y del trazado de la vía por la que se circule. A través del control electrónico de estabilidad ESC se puede elegir entre cuatro modos diferentes de conducción -normal, eco, sport y offroad- . La suspensión se comportara en cada una de ellas de forma distinta, para viajes por autovía el coche bajara y en trayectos offroad aumentará su separación del suelo en 35 mm respecto a su posición normal, pero esta altura se puede aumentar en otros 15 mm a voluntad del conductor.

Las batería del e-tron, el corazón del nuevo vehículo de Audi, pesa 700 kilos, está situada entre los ejes, y tiene una garantía de 8 años. La carga se puede realizar en las estaciones de recarga rápida, que recupera el 100% de la batería en menos de media hora . A finales de este año habrá 200 de estas estaciones en la red europea Ionity, pero para 2020 se espera duplicarlas hasta alcanzar las 400. Estas estaciones estarán situadas en las principales vías de tráfico cada 120 kilómetros.

También puede recargarse con cargadores de corriente alterna de hasta 11 kW y un segundo cargador opcional de 22 kW, lo que hará posible que la red de recarga en toda Europa alcance 65.000 estaciones públicas.

En el domicilio particular se puede enchufar a la corriente normal de 230 voltios o bien a un enchufe trifásico de 400 voltios que cargaría la batería en ocho horas y media.

El interior del vehículo es un lugar amplio, con un «cockpit» el que mandan las pantallas digitales y está enfocado hacia el conductor, de tal manera que los botones han desaparecido. Los materiales empleados son acogedores, con cuero Valcona, aluminio oscuro cepillado o madera de fresno, entre otros productos.

Existe la opción de adquirir la llave «connect ley» que permite el acceso digital al coche y que a través del smartphone pueden acceder hasta cuatro personas al coche -abrir puertas y arrancarlo-.

El silencio propio de los coches eléctricos permite apreciar mejor la calidad del equipo de sonido que incorpora el e-tron, con altavoces Bang & Olufsen Premium Sound.

Los sistemas de asistencia al conductor son los más completos del mercado. Incorpora el asistente de crucero adaptativo, detención de líneas de carril, asistente de tráfico cruzado, así con el aviso de cambio involuntario de carril o de salida. La cámara de 360 grados suministra múltiples vistas para facilitar las maniobras .