Skoda incrementa su beneficio un 34,6%, hasta los 1.600 millones de euros

Para Skoda estas cifras están en línea con la estrategia de crecimiento que se ha fijado para 2025 y que establece el lanzamiento de 19 nuevos vehículos para 2020, entre los que se incluye la versión de producción del prototipo Vision X, que se desveló en el pasado Salón de Ginebra de marzo.

Según el consejero delegado de Skoda, Bernhard Maier, la compañía está inmersa en su plan estratégico para 2025 que incluye, a parte del lanzamiento de los citados nuevos modelos, el «programa de inversión más completo en la historia de la compañía».

«En los próximos cinco años, Skoda invertirá alrededor de 2.000 millones de euros en electromovilidad y nuevos servicios móviles », ha subrayado Maier. Por su parte, el miembro de la junta directiva de Skoda para Finanzas e Informática, Klaus-Dieter Schürmann, ha afirmado que «la atractiva combinación de modelos y los costes optimizados de los productos» han permitido crecer de manera rentable.

En 2017, ha explicado, el beneficio operativo aumentó «desproporcionadamente» respecto a los ingresos debido, «principalmente», a la implementación de la «estrategia SUV (de vehículos todocaminos)" y al mejor posicionamiento de costes».

En concreto, el beneficio operativo ascendió a 1.600 millones de euros, lo que supuso un 9,7 % sobre la facturación de las ventas.

Antes de impuestos, Skoda incrementó su beneficio un 33,9 %, hasta los 1.570 millones de euros; una cifra que disminuyó a 1.274 millones de euros una vez descontados éstos.

La inversión del fabricante checo durante 2017 fue de 733 millones de euros. Respecto a las entregas, China fue su mayor mercado por volumen de ventas, con 325.000 unidades comercializadas.

Le siguió Alemania (173.000), la República Checa (95.000), Reino Unido (80.100), Polonia (66.600), Rusia (62.300), Francia (27.300), Turquía (25.000), Italia (24.700) y Austria (24.300).

Skoda ha señalado que actualmente cuenta con siete modelos (Citigo, Fabia, Rapid, Octavia, Karoq, Kodiaq y Superb) con los que "tiene la cartera de productos más completa en su historia".

De estos, el Octavia fue el "modelo más popular" de 2017, aunque las ventas del Superb "no paran de crecer"; y del Kodiaq consiguió matricular alrededor de 100.000 unidades en su primer año completo que ha estado a la venta.

Del Karoq, que el fabricante checo lanzó el pasado otoño, ha comercializado 6.500 unidades.

La marca ha destacado que en el futuro se centrará "completamente en la electromovilidad" y que va a continuar trabajando en desarrollar innovaciones tecnológicas con el objetivo de tener un total de diez modelos electrificados en el mercado en 2025.

La producción en serie de su primer vehículo 100 % eléctrico, el Skoda Citigo, comenzará en 2019, al igual que el Super híbrido enchufable, que será su primer vehículo de este tipo.

También fabricará componentes de vehículos eléctricos para otras marcas del Grupo Volkswagen, al que pertenece.

Como parte de su estrategia de futuro, avanzará en los temas de conducción autónoma, conectividad y digitalización de productos y procesos y, por último, planea expandirse a otros mercados (de los 102 actuales a los 120), como Singapur a finales de año y Sudáfrica en 2019.