Probamos la tercera generación del Honda Jazz

El pequeño pero muy capaz Honda Jazz llega para pelear en un segmento, el B, muy complicado por la cantidad de modelos a la venta y muchos de ellos con el valor añadido de ser fabricados en nuestro país y por tanto con la posibilidad de ajustar mucho más sus precios .

Aún así el nuevo Honda Jazz dispone de argumentos muy poderosos para entrar en la pelea en buenas condiciones.

Tiene un exterior moderno con aspecto de monovolumen pero muy recogidito en la zona trasera. El diseño del frontal, un tanto agresivo, recuerda a otro japonés de reciente aparición, da paso a un lateral con un nervio que lo recorre hasta una zaga plana que permite una altura de carga baja y muy amplia, que da paso a su vez a un maletero enorme de 354 litros y donde si abatimos los asientos traseros aparecen unos magníficos 1.314l.

En cuanto al interior ya hemos mencionado que el nuevo Jazz ha ganado espacio en todas las cotas y si el anterior ya resultaba amplio, este aumenta esas sensaciones con un salpicadero donde los distintos puntos de interés están dispuestos tridimensionalmente y mirando al conductor.

Los asientos son bastante cómodos y rápidamente se encuentra una buena posición al volante. Además, todos los mandos, como he comentado, se encuentran en una buena disposición. Gracias a la inclinación del parabrisas la visibilidad y sensación de amplitud es muy agradable y sorprende la buena visibilidad que nos proporciona la luneta trasera , muy plana.

También y como viene siendo norma en todos los Honda , el nuevo Jazz viene con los Honda Magic Seats . Cambiando la disposición del depósito de la gasolina de la zona trasera a debajo de los asientos delanteros donde no molesta, los asientos traseros se pueden abatir hacia delante como en cualquier coche o plegarlos hacia arriba «como se puede observar en la foto» dejando un espacio enorme entre el respaldo y el asiento de estos y los asientos delanteros. Una solución muy inteligente que Honda tiene patentada que permite un aprovechamiento del espacio interior que de otra forma se pierde y que en Honda identifican con una filosofía de diseño basada en el concepto « Man maximum, machine mínimum ». Es decir todo para el ser humano y lo mínimo para la máquina.

Ahora que todos los constructores abogan por la reducción de sus motores añadiendo un pequeño turbo a motores de tres cilindros , Honda, el primer constructor de mundo de motores, se desmarca con una única mecánica de cuatro cilindros y 1.3 litros V-iTEC de ciclo Atkinson de gasolina que dan 102 caballos y 123Nm de par a 5.000rpm. El nuevo motor con un nuevo sistema de control de distribución variable (VTC) que optimiza la apertura y cierre de las válvulas de admisión se muestra algo perezoso en la zona baja del cuenta revoluciones y muy alegre cuando le pisamos con decisión y lo subimos de vueltas pero esto, que no es problema en ciudad , si obliga a utilizar el cambio más de lo necesario en los pequeños desplazamientos por carretera y a muchas revoluciones. A cambio, los consumos en el ciclo combinado y con la caja de cambios automática CVT son buenos con unos 4.6 litros cada 100 kilómetros y unas emisiones de CO2 de 106g/km cumpliendo además la Norma Euro 6.

De serie el nuevo Honda Jazz vendrá con una caja manual de seis velocidades bien escalonada para reducir los consumos y opcionalmente una caja automática CVT «1.000 euros» que como en todos los casos se muestra muy chillona cuando le pisamos con energía y ha de subir de vueltas rápido. No es desde luego el tipo de caja de cambios más adecuado a nuestro entender y ese desagradable sonido casi inevitable en otros casos se puede mitigar en este Jazz llevándola en la posición S que sube de vueltas el motor un poco y ya no tiene que hacer tanto esfuerzo por seguir subiendo. A cambio, como digo, los consumos son muy comedidos en el ciclo combinado .

El problema de los coches de importación es que si no se crean paquetes cerrados de equipamiento pueden tardar mucho en llegar desde sus países de origen. Por eso los fabricantes prefieren traer coches ya hechos con un buen equipamiento de serie. Así el nuevo Jazz vendrá desde el más básico Trend con Control de estabilidad y tracción VSA, Sistema de aviso de desinflado de neumáticos, Sistema Activo de Freno en Ciudad, Multi Info Display, Luz indicadora de cambio de marchas, Dirección asistida eléctrica, Sistema de ayuda de arranque en pendiente, Sistema de parada automática al ralentí - Idle Stop, climatizador y Control de crucero con limitador de velocidad entre otros muchos. El siguiente escalón es el Comfort que suma al anterior el Sistema de Reconocimiento de Señales de Tráfico, Limitador de velocidad inteligente, Avisador de Cambio Involuntario de Carril, Sensores de aparcamiento delanteros y traseros y el muy completo sistema de entretenimiento Honda Connect que incluye una pantalla táctil 7", CD, AM/FM, Aha ™ integrado e internet . Y por último el Elegance que añade alarma, volante y pomo de la palanca de cambio en piel, cámara de visión trasera con función aparcamiento, luces de carretera automáticas (HSS), faros antiniebla y el sistema de apertura y arranque sin llave (Smart Entry) .

El Honda Jazz llega a una encarnizada pelea con buenos argumentos aunque a un precio algo alto. Tiene uno de los mejores interiores del segmento y la conducción aparte de los inconvenientes del cambio opcional CVT resulta convincente con un buen aplomo y agarre en carretera. En definitiva un buen coche, bien acabado y con un equipamiento muy completo .

Estará a la venta en septiembre para entregar las primeras unidades en octubre. Los precios parten de 15.900 euros para el Trend, 16.900 para el Comfort y 18.500 para el Elegance . En los dos últimos el navegador opcional cuesta 600 euros y en cualquier de los tres la caja automática 1.000 . Seguramente haya una oferta de lanzamiento aunque aún no está decidida que mejore el precio de salida