Ocho sendas para descubrir parajes ocultos de Madrid
La calzada Borbónica, la senda de los Alevines o el camino de los viejos mineros conducen a paisajes desconocidos de la región; aquí tienes una selección para disfrutarlas en familia
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12345678Valle de la Barranca, senda a los pies de La Maliciosa
ABC Este recorrido de casi 9 kilómetros (sólo ida, unas dos horas y media a pie) es ideal para contemplar las variaciones en la vegetación consecuencia de la influencia, tanto de la altitud, como de la humedad, ya que con respecto al primer factor podremos observar, a los pies del Pico de La Maliciosa, el límite del pinar. Respecto al segundo, el incremento de especies vegetales. Así se puede comprender la estructuración abierta de los pinares de pino silvestre con un sotobosque poco denso.
El punto de acceso al recorrido está mal comunicado por transporte público, por lo que se recomienda realizarlo acompañado por más personas que lleven otro coche y que realicen el paseo en sentido contrario para intercambiar las llaves en el recorrido. El punto final del recorrido está situado en la antigua ubicación del Real Sanatorio de Guadarrama. No se aconseja dejar el vehículo en el hotel y terminar en el Ventorrillo, ya que luego habrá que recorrer cerca de seis kilómetros, de los cuales tres son por la carretera M-601, que pueden ser peligrosos ya que presenta una gran intensidad de tráfico.
Camino Schmid, por la sierra entre Segovia y Madrid
ABC El recorrido, marcado en 1926 por Eduardo Schmid (perteneciente a la Real Sociedad Española de Alpinismo Peñalara) comienza y termina en la Comunidad de Madrid, pero discurre también por la provincia de Segovia. Bordea al norte las emblemáticas cimas de los «Siete Picos», saliendo de Majavilán en dirección a la pradera de los Corralitos, siguiendo los círculos de pintura blanca de la calzada Borbónica. Entre ambos lugares se encuentra el Puente del Descalzo. Al salir de la pradera se deben seguir los círculos de pintura amarilla del Camino Schmid.
Tras cruzar el puente del arroyo de la Fuenfría, una senda señalizada por pintura amarilla parte a la izquierda de la pista forestal, iniciando el ascenso a través del pinar. Alcanzando el cruce con la pista forestal se encuentra la fuente Antón Ruiz de Velasco, y después se asciende hasta la pradera de collado Ventoso. Aquí es importante seguir de frente y a la derecha (al Pico de Majalasna) ni a la izquierda (al puerto de la Fuenfría), continuando ya en Segovia por un denso pinar hasta el puerto de Navacerrada.
Senda de los Alevines, el primero de los Siete Picos
ABC El recorrido, de cuatro horas de duración, parte desde el Puerto de la Fuenfría en dirección hacia el Collado Ventoso. Se puede ir andando desde el aparcamiento de Majavilán y alcanzar el puerto de la Fuenfría, pero eso supone unos cuantos kilómetros de ascensión por la pista forestal denominada carretera de la República. Otra alternativa es subir por el Camino Schmid hasta llegar al Collado Ventoso, tomando la senda que sale a la derecha señalizada con un cartel que indica el nombre de la misma, "Senda de los Alevines". Siguiendo esta senda se llega a las inmediaciones del Pico de Majalasna, el primero de los Siete Picos.
La pradera del mismo nombre se encuentra más o menos a mitad de camino, y allí se pueden observar como los herrerillos comunes, carboneros comunes, mitos, trepadores azules y agateadores comunes. Desde aquí empieza el descenso hacia la pradera de Navarrulaque, dejando el anfiteatro de los Siete Picos a la izquierda. Al encontrarse en un espacio natural protegido, no hay que olvidar ser respetuosos con el entorno durante toda la excursión.
Senda de la Mina de Plata, el camino de los viejos mineros
ABC Esta es una cómoda excursión que puede completarse en unas dos horas (con unos 6 kilómetros de recorrido), que transcurre entre prados y huertos en dirección hacia las antiguas minas de plata de Horcajuelo de la Sierra, que empezaron a ser explotadas a mediados del siglo XIX, y que están enclavadas en un entorno que ha conservado por su aislamiento una valiosísima biodiversidad compatible con los usos tradicionales. En este paseo se puede ver incluso la bocamina, excavada en roca en el filón principal, pero no está garantizada la seguridad dentro de las minas, así que no se debe entrar en las mismas.
En los alrededores de la bocamina se pueden todavía observar antiguas edificaciones de piedra que servían de almacén, y que dan una idea de cómo era el duro trabajo de la minería. Coincide en su parte inicial y final con la senda Paseo por los Terreros y la Calleja de los Llanos. También se recorre parte del Cordel de la Pradera de Sacejo al Cerro de la Mina, vía pecuaria que conecta Horcajuelo de la Sierra con los montes de la Sierra de Cebollera nueva a través de la Cañada del Cerro.
Senda de la calle Alta, caminando por la ladera del infierno
ABC Este camino de trazado circular (con inicio y fin en el mismo punto) se recorre en unas cuatro horas (12 kilómetros), y pasa por la vertiente occidental del Valle, por la ladera del Infierno, llegando a cotas superiores a los 1.700 m. Desde el centro de educación ambiental Valle de la Fuenfría se sube hasta el Hospital de la Fuenfría. Dejando éste a la izquierda, se asciende hasta una pradera llamada plaza de España. A la derecha, se continúa por el Camino Viejo de Segovia para tomar la vereda del Poyal de la Garganta que conduce hasta el Collado de Marichiva: a la derecha se alza Peña Bercial, a la izquierda Peña del Águila.
La pista forestal continúa sin apenas desnivel. En el recorrido se pueden observar arbustos como piornos serranos, enebros enanos y cambroños. Existe la posibilidad de atajar a través de la vereda de la Piñuela, que sale a la izquierda de la pista forestal, antes de llegar a un pilón ganadero. Si se continúa por la ancha pista forestal, a 400 metros hay que girar a la izquierda para desviarse por la estrecha vereda de los Poyalejos, la cual desemboca en la pista forestal de Los Campamentos.
La vega del Pingarrón, subida al vértice del Butarrón
ABC Para este recorrido de casi 30 kilómetros hay que emplear unas seis horas de caminata en las que es difícil aprovisionarse de agua, por lo que la primera consideración será preparar cantimploras, buen calzado y ropa de abrigo. La ruta es circular, con inicio y fin en el mismo punto, recorriendo la vega de San Martín de la Vega y los cerros situados en el margen izquierdo del río Jarama, con parajes y vistas panorámicas de gran belleza.
El primer tramo parte de San Martín de la Vega hacia Vallequillas, ascendiendo por un paisaje mixto de encinar y cultivos de cereal hasta la vía pecuaria del Pingarrón, en la parte alta, continuando por paisajes de olivar y secano. Al llegar al desvío de Valromeroso, se puede continuar hasta el vértice geodésico del Butarrón, con impresionantes vistas panorámicas, o bien, bajar directamente hacia la zona de la vega del Pingarrón. Para terminar el recorrido, hay que seguir el camino de acceso a la vega del Pingarrón hasta la carretera M-506 (aquí habrá que actuar con precaución al cruzar), para finalizar en San Martín de la Vega.
Cancho de los muertos, un día de montañismo
ABC Este recorrido, de unos cinco kilómetros y medio, puede completarse en dos horas y media y es apto para cualquier persona con un mínimo de preparación física. El itinerario, señalizado en todo momento con balizas direccionales, comienza a unos 1.000 metros del aparcamiento de Canto Cochino, y a lo largo del camino se puede observar la variación que introduce el río Manzanares en la vegetación de la zona, pues en sus riberas se desarrollan sauces, fresnos e incluso algún avellano.
El sendero discurre entre pinares procedentes de repoblaciones, en los que se pueden observar distintas especies de pinos: laricio, resinero y silvestre, entremezclados con cipreses de Arizona. En el sotobosque aparecen jaras pringosas, torviscos, zarzas y en zonas más abiertas, cantuesos y tomillos. La jara estepa, de hoja más ancha y con menos ládano que la jara pringosa, comienza a ser más frecuente. En las rocas se desarrollan especies adaptadas a la escasez de agua, gran número de líquenes y musgos, y también plantas como el ombligo de Venus, el sedum o la dedalera.
Senda del Soto de las Juntas, el camino de los búhos reales
ABC Esta ruta recorre uno de los parajes de mayor belleza y valor natural del Parque Regional del Sureste, conformado por una especie de península ribereña de los ríos Jarama y Manzanares que finaliza en la confluencia (junta) de ambos cursos de agua. El camino puede iniciarse desde un aparcamiento próximo a la salida 19 de la A-3, o bien desde la estación de metro de Rivas-Vaciamadrid, lo que obligará a cruzar dicha autovía por un paso superior para peatones que llega a escasos 100 metros del citado aparcamiento.
Durante el trayecto se pueden observar formaciones vegetales típicas de ecosistemas de ribera y soto, así como avifauna acuática en el complejo lagunario enclavado en la zona intermedia de este paraje, con especies como ánade real, focha, gallineta de agua, porrón común o somormujo. Para su cómoda observación se han instalado varias casetas-observatorio ornitológicas. Además de avifauna acuática, también es posible el avistamiento de avifauna forestal como el milano negro o el búho real, que anida en los cortados que se divisan al otro lado del río Manzanares.