Hay que buscarlas pero todavía es posible repostar en el centro de la capital sin tener que salir a la carretera. Estos pequeños surtidores que no tienen tantos servicios como las grandes gasolineras llevan instalados muchos años. Además, tienen mucha clientela fija, ya que según ... explican a dos empleados de gasolineras la mayoría de sus usuarios son habituales ya sea porque viven en los alrededores o porque les quedan cerca del trabajo.
Durante mucho tiempo hubo reticencias entre los vecinos más cercanos a este tipo de estaciones de servicio por los accidentes que pudieran provocar en pleno casco urbano pero hoy en día son muy bienvenidas como nos cuenta una usuaria que asegura que le «resulta muy cómodo que haya un surtidor aquí», igual que una vecina que «preferiría que estuviera en otro sitio pero por comodidad nos viene muy bien al barrio».
Las gasolineras en el centro de Madrid: de odiadas a queridas
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