En un mes se tendrán los primeros datos sobre los restos de Cervantes
La búsqueda del cuerpo del ilustre escritor se inicia el lunes en el convento de las Trinitarias de Madrid
En un mes estará listo el informe del georradar sobre el subsuelo de la iglesia del convento de las Trinitarias, donde fue enterrado hace ahora 400 años Miguel de Cervantes, el más ilustre escritor en lengua española de la historia. Esos primeros datos pueden impulsar, si son propicios, la continuidad de un proyecto que podría llevar hasta el cuerpo del escritor en este mismo año. El historiador Fernando Prado y el geofísico Luis Avial, con el apoyo del eminente antropólogo forense Francisco Etxeberría, inician el lunes esta búsqueda, que cuenta para la primera fase con un presupuesto de 12.000 euros que pone el Ayuntamiento de Madrid.
La idea será llegar a primera hora del lunes con el georradar a la iglesia de las Trinitarias, donde se estudiarán concienzudamente, durante unos cuatro días, suelos y paramentos verticales, además de la misteriosa cripta que permanece cerrada desde hace más de 50 años. El resultado de este primer informe aportará datos sobre huecos, cavidades o sepulturas.
Entonces, será el momento de iniciar la segunda fase, la de la excavación, para localizar huesos. Y a la que seguirá la de análisis de esos restos en el laboratorio, por parte de los antropólogos forenses de la Sociedad Científica Aranzadi, que tendrán como pistas la herida en la mano izquierda del escritor y los dos arcabuzazos recibidos en el pecho durante la batalla de Lepanto, además de otras características físicas que serían objeto de estudio.
«El éxito es ya sólo intentarlo», asegura el concejal de Las Artes, Pedro Corral, que cede protagonismo a los tres investigadores, quienes a su vez aportan el rigor a esta operación que puede terminar con la localización de los restos del más universal de los escritores españoles. Las excavaciones, si llegan a realizarse, se harán de manera muy puntual, invadiendo lo menos posible un espacio, el de la iglesia, que es un bien protegido.
Toda la operación tendría un coste cercano a los 100.000 euros. Es «seguro al cien por cien», según Fernando de Prado , que Cervantes está ahí; otra cosa es que la operación consiga localizar el punto exacto donde se encuentra.
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete