El mapa de la España sin suerte

A pesar de haber recibido por fin su premio, estas tres provincias siguen siendo las menos afortunadas todavía. Ninguna tiene tan pocos. Le siguen, con dos, Guadalajara , Orense , Huelva y Salamanca . Hasta 2012, estas dos últimas se sumaban a Tarragona, Ávila y Zamora como provincias sin premio; sin embargo, el Gordo del sorteo de ese año, repartido en 67 localidades diferentes, el más repartido de la historia hasta entonces, multiplicó el número de municipios afortunados.

Antes de 2012, solo habían sido premiadas 157 localidades; después, eran 207 en total. Desde el año pasado, esa cifra se ha disparado a 336 municipios. La suerte se repartió en 2018 entre 189 localidades diferentes, gracias a décimos vendidos en 248 administraciones distintas . En 129 localidades cayó el Gordo por primera vez en la historia.

El afortunado 03347 se expidió en 22 administraciones de la provincia de Las Palmas, 21 de Madrid, 18 en Málaga, 14 en Barcelona y otras tantas en Santa Cruz de Tenerife, 13 en La Coruña… Hasta 46 provincias se llevaron premio. Solo Guadalajara, Álava, Castellón y Palencia se quedaron sin celebración, además de Ceuta y Melilla. En Melilla nunca ha caído el Gordo.

Otras provincias con poca fortuna son Ávila , Gerona y Teruel , donde solo se han vendido tres Gordos en cada una en toda su historia. Cuatro han caído en Castellón, Ciudad Real, Cuenca, Pontevedra y Soria.

En el lado contrario, Madrid es la provincia donde más veces ha caído el Gordo , con 92 primeros premios, por delante de Barcelona, con 58. En Madrid, no obstante, los premios están más concentrados en la capital, con 79 Gordos, el último el año pasado. Sus 92 premios se reparten entre 20 localidades; mientras que en la provincia catalana, a pesar de contar con menos premios, estos se reparten entre 21 municipios distintos.

Murcia es, con 19 municipios, la tercera provincia con más localidades diferentes premiadas. La cuarta posición, con 17, la comparten Valencia y Las Palmas. La provincia canaria sumó una docena el año pasado, un sorteo que cambió el mapa de la suerte de España.