La juez detiene a un cuarto implicado por la muerte de los holandeses

Según ha informado hoy el Tribunal Superior de Justicia de Murcia, la jueza ordenó el pasado viernes este último encarcelamiento, que se suma a los de los tres detenidos en relación a este caso, un español y dos rumanos.

Hasta el momento no ha trascendido la relación de este cuarto imputado , cuya identidad se corresponde con las iniciales S.A.L., con los otros tres detenidos, ni tampoco si su declaración ante la jueza se produjo tras ser arrestado.

La exjugadora internacional de voleibol, que jugó en España entre 2009 y 2009, llegó a Murcia junto a su novio el pasado 13 de mayo, y cuatro días después se dio la alerta por la desaparición de la pareja, que finalmente fue hallada muerta el 27 de mayo, en un paraje de huerta de la pedanía murciana de Alquerías, y según la autopsia, fallecieron por los golpes propinados en la cabeza con un objeto romo.

Posteriormente, la Policía detuvo a Juan Cuenca, exgerente del club en el que militó la exdeportista holandesa y principal imputado, y a los dos rumanos

Los hechos se remontan al 13 de mayo, cuando la pareja desembarcó en el aeropuerto de El Altet (Alicante) con la intención de pasar tres días en Murcia. Solo un día después, a mbos tenían una cita médica en una clínica de la capital murciana.

El lunes, 13 de mayo, comenzó su última visita. La pareja alquiló un coche en el aeropuerto, un Fiat Panda de color negro con matrícula 9254 GTC, con el que se desplazó hasta Murcia, donde se hospedaron en el hotel Churra-Vistalegre. Ese mismo lunes fue el último día en el que se les vio con vida: tras registrarse en la recepción del hotel, volvieron a coger el coche por la tarde y desaparecieron. Los cuerpos fueron encontrados días después en una zona de huerta de la pedanía de Alquerías. La pareja había muerto de forma violenta varios días antes en una casa de el Fenazar de Molina de Segura.

A finales de junio, los tres detenidos por su presunta implicación en el crimen de la pareja holandesa, volvieron a acogerse a su derecho a no declarar ante la titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Molina de Segura, Olga Reverte, quien ratificó la prisión decretada sobre ellos.