«Vi una riada de gente bajar como hormigas al hormiguero»

Así lo ha indicado una de las abogadas de las víctimas, María José Siñeriz, quien ha asegurado que ni este conductor ni el camillero, Saady Dans-Salvatierra, se encontraban en el lugar de los hechos cuando se produjo la primera avalancha. «No llegaron a tiempo, pero si hubieran llegado a tiempo no habrían podido hacer nada», ha asegurado otro de los abogados, Felipe Moreno, quien ha destacado que las dos ambulancias que prestaron servicio contratadas por Viñals la noche de los hechos « no tenían ni desfibrilador, ni material ».

Así, una de estas ambulancias en la que prestaron servicio los técnicos de emergencias que han prestado declaración este lunes se encontraba en el momento de los hechos, según el letrado del médico Simon Viñals, José Crespo, realizando un traslado por intoxicación etílica a la Fundación Jiménez Díaz . La otra de las ambulancias, una UVI Móvil, no contaba ni con médico ni con DUE, lo que según Moreno, hace que esta ambulancia «no fuese UVI ni fuese nada» y la convierte en una «ambulancia básica normal».

A su juicio, esto pone de manifiesto la « falta de previsión » del sistema médico del que estaba al mando el doctor Viñals. Por su parte, el letrado defensor del médico ha apuntado que el jefe de los servicios técnicos de asistencia sanitaria, Jorge Rodríguez Ugarte, en su declaración ha apuntado que «no aportó el médico, ni el DUE de esta UVI móvil porque presupuso que el equipo médico era suficiente para la atención en un traslado y que, en este caso, era mejor esperar al Samur ».

«Entre que se produce la avalancha, a las 3.29 horas, y en lo que las niñas llegan a la enfermería, a las 4 horas, pasa media hora. ¿Qué hacían las dos ambulancias entre las 3.30 y las 4 horas? », se ha preguntado Siñeriz, quien ha recalcado que «si hubiera que sacar alguien a las 3.29 y 15 segundos no se podría haber llevado» debido a la «ausencia de ambulancias».

Siñeriz ha agregado que jefe de los servicios técnicos de asistencia sanitaria ha explicado que Trusthealth Services Management era una empresa «intermediaria» que «no tiene servicio de ambulancias». «Gestiona servicios que contrata con otro, por eso, el servicio viene a nombre de Trusthealth Services Management, que es la empresa del hijo de Viñals y se dirige a Simon Viñals», ha apuntado.

La defensa del doctor Viñals: «No hubo negligencia»

El letrado defensor del doctor Viñals ha explicado que el jefe de los servicios técnicos de asistencia sanitaria ha aportado un informe en el que se recogen las incidencias que ocurrieron ese día y en el que «se pone de manifiesto que no hubo ni la más mínima negligencia, irregularidad o pasividad por parte de todo el equipo médico del señor Viñals».

Según ha detallado el abogado en este informe tantos los técnicos de la ambulancia convencional, como los de la UVI móvil no detallaron «ninguna irregularidad» . De esta forma Crespo ha desmentido que estos técnicos hubieran tenido que «comerse el marrón solos» porque no se hubiera actuado de forma adecuada como se debería actuar.

No obstante, para los letrados de las víctimas la atención médica «fue insuficiente». De hecho, Moreno ha recordado que el ATS que acompañaba a Simón Viñals, Cecilio Page, aseguró en su declaración del viernes que la enfermería era un «botiquín infradotado, sin ventilación y, prácticamente, carecía de agua».