El organizador del Madrid Arena encargó 17.500 entradas para un aforo de 10.600 personas

Diviertt hizo cinco pedidos por correo electrónico a la imprenta Pedraza, cuyo transportista entregó en las oficinas de la promotora del evento.

El primer pedido, de 5.000 entradas, lo hizo el 25 de septiembre de 2012, y el segundo encargo, de 3.000 unidades más, fue el 27 de septiembre.

El tercer pedido fue el 4 de octubre del año pasado, de 1.000 entradas más, mientras que el cuarto encargo, de otras 500 unidades, fue el 9 de octubre y el quinto pedido, de otras 8.000 entradas, fue el mismo 9 de octubre.

El administrador de la imprenta entregó en el Juzgado el pasado 21 de febrero los pedidos por correo electrónico, excepto uno, debido a que fue destruido un mes después por el programa informático, y cinco partes de pedido y planchas.

Además, aportó una muestra de numeración y código de barras, que llevan cuatro colores y una tinta invisible como seguridad. Si existieran copias no llevarían esa tinta invisible.

El pabellón Madrid Arena tenía un aforo permitido para el evento de 10.600 personas, pero el recuento judicial de las entradas desveló que en las ocho urnas encontradas había más de 16.700 boletos, cifra que supera en un 58% el aforo autorizado.