El AVE del Eje Atlántico se convierte en una realidad el próximo domingo

La puesta en servicio de la vía, con la realización del primer viaje de prueba entre La Coruña y Vigo, permitirá acreditar que todo está dispuesto para vender billetes a partir del mes de abril y, en consecuencia, poder explotar una infraestructura cuyo presupuesto asciende a 2.302,5 millones de euros y cuya inauguración permitirá reducir los tiempos de viaje entre las urbes gallegas de la fachada atlántica.

Las previsiones de Fomento sitúan el tiempo de viaje entre La Coruña y Vigo en 70 minutos, 50 menos que hasta ahora. Viajar entre Santiago y Vigo llevará tres cuartos de hora y entre Vigo y Pontevedra, sólo 15 minutos. La nueva línea está diseñada para permitir velocidades que rondan los 250 kilómetros por hora, y contará con los sistemas de seguridad ERTMS y ASFA.

La titular de Fomento confirmó que los trenes que llegan a Vigo desde Orense y Madrid continuarán haciéndolo a través de la estación de Guixar, mientras que la nueva infraestructura ferroviaria de Urzáiz acogerá los trenes del Eje Atlántico tal y como «dice el sentido común». Precisamente los trabajos en la futura terminal del AVE están prácticamente concluidos y los operarios ya han empezado a asfaltar el acceso desde la calle Lepanto, muy deteriorada después de tres años de actividad. La estación de Urzáiz ha costado 100 millones de euros. Para el futuro queda la construcción del edificio que la coronará, diseñado por el arquitecto Thom Mayne, que acogerá un parking y un centro comercial.

El anuncio de la ministra Pastor pone fin a la incertidumbre sobre los plazos de ejecución de una línea considerada «estructural» por los agentes sociales, políticos y económicos gallegos y cuya gestación se remonta al año 2001 en forma de mejora de una línea que es muy rentable para Renfe.

La sucesión de los gobiernos y la dilatación en la ejecución de las obras ha ido provocando saltos en el calendario. Tras el anuncio a comienzos de la década pasada se fueron sucediendo fechas como la marcada en el año 2007, en el año 2009 o en el año 2011. En este intervalo de tiempo se han construido 32 túneles con una longitud de 59 kilómetros y 32 viaductos con una extensión de 14.893 metros, lo que se convirtió en un reto para la ingeniería española.

Desde su llegada al Gobierno, Ana Pastor trató de acabar con los aplazamientos y cerró la fecha del 2014. De forma explicativa, y sin responsabilizar a sus antecesores, aclaró que «las complejidades técnicas originan parones», y advirtió de que el presupuesto no sería un inconveniente. Finalmente, y superados los obstáculos derivados de la complejidad técnica del proyecto, la obra está finalizada.

La marcha del AVE para conectar la Comunidad con la Meseta también van según lo previsto. La responsable de la obra pública señaló que el Gobierno destinó durante esta legislatura «3.000 millones de euros» al AVE en Galicia, cuyas obras «continúan» en su totalidad. Sobre este punto, manifestó que las empresas constructoras «tienen compromisos con sus contratos que tienen que cumplir» para dotar a Galicia de este servicio.