inauguración del curso escolar

«¡La Reina Letizia olía genial!»

Álvaro Batista, de 4º de Primaria, sabía que el día era histórico y no lo dudó: se amarró la pajarita. Celia, que tocó el violín, se esperaba a los Reyes «secos y fríos, pero son encantadores»

«¡La Reina Letizia olía genial!» Miguel Muñiz

A. Coco

Adrián se apellida como la Reina. Tal vez por eso, cuando el Rey le encomienda un encargo, lo ejecuta. Con sus pantalones cortos azules, sus nueve años y sus bambas bien atadas, abandona la fila y camina hacia Doña Letizia, de espaldas a él mientras ... charla con otros niños. Así que, Adrián Ortiz, que aún no ha dado el estirón, toca en el hombro de la Reina. Hay que volver a la fila para hacerse una fotografía de grupo. Y ambos regresan juntos.

Adrián es uno de los 234 alumnos del colegio Ben Cho Sey que ahora saben cómo son unos Reyes de cerca. No todos lo terminaban de tener claro. Álvaro Batista, de 4º de Primaria, sí que sabía de la importancia de la jornada en Pereiro de Aguiar . Así que al despertarse, se amarró la pajarita negra al cuello. «La Reina me ha dicho que estoy muy guapo cuando me ha visto». Dos de sus compañeros, por el contrario, optaron por enfundarse la camiseta del Atlético de Madrid en pleno interior de Orense para ganarse un gesto de aprobación de Don Felipe. Varias niñas no pasan por alto que el lunes Doña Letizia había cumplido 42 años . «¡Hay que felicitarla!».

Entre los protagonistas de la inauguración del curso escolar, quienes más motivos tenían para los nervios, menos lo estaban. Celia al violín, Aldara al teclado y Cecilia, Mateo, Mauro, Martín y Miguel a la flauta, interpretaron al final de la ceremonia el tema «Son do Ar» de Luar Na Lubre.

—¿Muchos ensayos?

—No, en realidad poquitos. La preparación ya venía de atrás —responde Salomé, la profesora de música que dirige al septeto en el gimnasio. Y los estudiantes presumen de los motivos por los que fueron los elegidos:«Porque no nos poníamos nerviosos».

«Doña Letizia nos ha dicho que lo habíamos hecho muy bien —comentan Celia y Aldara—. Y que la próxima vez incorporemos más instrumentos». Las dos pensaban que los Reyes «serían más secos y fríos. Pero son encantadores y muy normales. La Reina olía genial e iban muy bien vestidos».

Ambos volvieron a Madrid con cartas y regalos como un libro sobre la ruta de 25 molinos en el río Loña. A Doña Letizia se la entregaron los representantes de los padres y madres del centro con algunas de sus reivindicaciones. Antes de la vuelta, pan de Cea, Ribeiro o queso San Simón.

«¡La Reina Letizia olía genial!»

Artículo solo para suscriptores

Accede sin límites al mejor periodismo

Tres meses 1 Al mes Sin permanencia Suscribirme ahora
Opción recomendada Un año al 50% Ahorra 60€ Descuento anual Suscribirme ahora

Ver comentarios