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Louro se salta los reparos técnicos y aprueba dos contratos irregulares
El número dos en el Lérez firmó la prórroga de dos servicios con la concesión caducada
Louro se salta los reparos técnicos y aprueba dos contratos irregulares
El pasado lunes el teniente de alcalde de Pontevedra, el socialista Antón Louro, dejaba clara su postura al respecto de las prórrogas «irregulares» que los nacionalistas acostumbran aplicar en el Lérez. Lo hacía a cuenta del contrato de limpieza viaria y recogida de basuras a ... Ferrovial Servicios (antigua Cespa) en cuyo expediente ve «puntos de oscuridad y falta de transparencia». En el enésimo desencuentro entre los socios del bipartito, el que fuera delegado del gobierno en Galicia cuestionó el principal argumento en el que se escuda el equipo de Miguel Anxo Fernández Lores para saltarse el procedimiento reglado: «No hay ningún informe que avale la teoría de que sería más caro licitar de nuevo el contrato».
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Ahora, la prórroga de dos servicios municipales de forma irregular deja en evidencia a quien tan solo hace tres días arremetía con dureza contra la decisión del área nacionalista. Se trata de la concesión de la limpieza en los talleres ocupacionales de Sor Lucía y en la Escuela Infantil de A Parda a la empresa Eurobrik, S.L. que Louro firmó en octubre y noviembre de 2013, pese a los reparos de los técnicos.
Fuera del plazo legal
En el informe emitido por Intervención, el servicio hace constar que la empresa solicitó la prórroga de un plazo ya vencido; en el mes de septiembre cuando ambos contratos habían caducado en julio. Así, apunta al texto refundido de la Ley de Contratos del Sector Público, que especifica que la prórroga no es válida una vez extinguido el vínculo por vencimiento del contrato, «por lo que no es posible la ampliación». Ampliación a la que, no obstante, Louro da su visto bueno en calidad de alcalde accidental, justificando que «existen innegables razones de interés público en la ejecución del servicio citado», sostiene.
Esta no es la primera vez que los socialistas pontevedreses protagonizan este tipo de casos, si bien es cierto que son más comunes en competencias de sus socios. Controvertida fue la renovación hace un año de la explotación del complejo de las piscinas de Campolongo , por cuarta vez con los informes contrarios de Secretaría e Intervención. El PP argumentó entonces que «el contrato firmado el 4 de julio de 2000 refleja un plazo improrrogable de diez años».
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