PP y PSOE aprueban las cuentas de Vigo al grito de «¡vivan los novios!»

La teniente de alcalde, Carmela Silva, ha sido la encargada de defender el presupuesto, que asciende a 228 millones , y ha recordado que son las cuentas «más sociales» de la historia de Vigo. «Es difícil comprender que alguien deje de aprobarlos», ha afirmado, y ha añadido, en referencia al BNG, que «sus jefes no les dejan votar a favor, ¿cómo van a explicar a los vigueses que votaron seis presupuestos y no los más sociales?». Silva ha repasado las principales cifras de las cuentas municipales, y ha resaltado las partidas destinadas a becas de comedor, becas de inglés, ayudas para el pago de alquiler, los alimentos o el suministro energético, o los 5,5 millones para el fomento de empleo. También ha destacado las obras de mejora en saneamiento y recuperación de espacios públicos, y las inversiones posibles gracias al bajo endeudamiento del Ayuntamiento.

La teniente de alcalde ha hecho un reconocimiento al PP, porque «entendió que no podía estar del lado de los ignorantes». «Tengo que decir que el PP no nos pidió nunca ningún recorte social, el BNG sí, en anteriores presupuestos», ha señalado. Silva ha ido más allá y ha acusado a los nacionalistas de «engañar a sus votantes, traicionar a la izquierda, y a los vigueses». «No les admito que me den lecciones de izquierda, porque ustedes piden en Vigo lo que no hacen donde gobiernan», ha criticado, en referencia al gobierno local de Pontevedra, presidido por un alcalde del BNG.

El portavoz del PP, José Manuel Figueroa, ha defendido la posición de su grupo al apoyar al PSOE en la aprobación de las cuentas , «por responsabilidad con Vigo y con los vigueses». «La confrontación no es buena para la ciudad», ha apuntado Figueroa, y ha acusado al BNG, que se negó a negociar las cuentas de 2014, de tratar de «chantajear» al gobierno municipal.

Figueroa ha recordado que el PP ha logrado introducir en el acuerdo con el gobierno cuestiones «vitales para el futuro de Vigo», como los terrenos para la Ciudad de la Justicia, las acometidas del hospital, las obras de la depuradora, el transporte metropolitano, el recibo del agua por consumo y no por tramos, las rebajas fiscales, o la supresión de los organismos autónomos. «Hay que trabajar juntos por el futuro de Vigo», ha proclamado, al tiempo que ha afeado al BNG por sus críticas al PP, cuando «hace 10 años le dio la alcaldía al PP». «La ciudad tiene que tener estabilidad, no apoyar a un alcalde y luego dejarlo tirado», ha añadido.

Por su parte, la portavoz del Grupo Municipal del BNG, Iolanda Veloso, ha explicado que su grupo no ha apoyado los presupuestos porque no atienden a las personas con más necesidades. Asimismo, ha afeado la conducta de los socialistas por pactar «con el partido de los recortes» en un «acuerdo inédito» que «tendrán que explicar». Veloso ha subrayado que el PSOE y el alcalde, Abel Caballero, «han demostrado que no creen en las políticas de izquierdas» al aliarse con el PP. «¡Cómo cambió el cuento en el último año! Ahora el PP ya confía en el PSOE», ha ironizado, y ha acusado a ambos de «pactar para usar el dinero de los vigueses para hacerse fotos con fines electorales».

Con respecto a la negativa a negociar las cuentas, como sí hizo el BNG en anteriores ejercicios con el gobierno local, Veloso ha proclamado que al PSOE «no le gustan las propuestas del BNG porque convierten sus presupuestos en presupuestos de izquierdas, y ellos los prefieren de derechas». «PP y PSOE ahora coinciden en sus prioridades», ha añadido. La concejala nacionalista, que ha tildado el acuerdo entre socialistas y populares de «pacto de silencio», también ha respondido a las alusiones sobre la llegada a la alcaldía de Corina Porro. «Nosotros no votamos a una alcaldesa del PP, el PSOE nos expulsó del gobierno local, y Pérez Touriño prefirió la presidencia de la diputación de La Coruña antes que la alcaldía de Vigo», ha afirmado.

Las intervenciones de los ediles han sido interrumpidas en varias ocasiones por personas que asistían al pleno como público. Por un lado, militantes y simpatizantes socialistas que aplaudían a Silva y al alcalde, y gritaban consignas como «¡Vigo avanza!».

Por otro lado, representantes de la CIG, trabajadores de las contratas y de otros colectivos, han abroncado al alcalde, a los concejales del PP y del PSOE, a los que les han pedido «que se besen», al grito de «¡Vivan los novios!».

A éstos, Abel Caballero les ha respondido advirtiéndolos de que no lograrían parar el pleno, y acusándolos de ser miembros de un «partido político antivigués», en alusión al BNG, y de estar «convenientemente dirigidos» para «reventar» la celebración de un «acto democrático». Mientras se desarrollaba el pleno, varias decenas de personas se han concentrado a las puertas del Ayuntamiento (representantes de la asociación de vecinos de Teis, de la Oficina de Dereitos Sociais de Coia y de la Plataforma contra los abusos bancarios, entre otros). Posteriormente, entraron en la lonja municipal gritando consignas como «Caballero dimisión» o «el pacto de la corrupción no es la solución», aunque la Policía les impidió acceder a otras dependencias y acabaron por irse.