Jueces gallegos «estrella»: En el juzgado y en los medios
Encargados de desentrañar los casos de asesinato, corrupción o accidentes que más preocupan a la opinión pública gallega, sus nombres son tan mediáticos como sus investigaciones
patricia abet
Las miradas de los gallegos están puestas desde hace meses en los juzgados de las principales urbes. Es en ellos donde se cuecen las investigaciones que han hecho temblar los pilares de muchos ayuntamientos de la Comunidad y donde se estudian en profundidad casos ... que por sus dimensiones o circunstancias han removido la sensibilidad de los españoles . Al frente de estos procesos —en muchas ocasiones de calado internacional— están magistrados conocidos en las salas de los tribunales y también fuera de ellas. Y es que las entradas y salidas de estos «jueces estrella» son seguidas por miles de gallegos capaces de poner nombre a sus caras y muescas en su trayectoria.
Liderando la nómina de jueces con más titulares a sus espaldas se encuentra el magistrado José Antonio Vázquez Taín , al frente del Juzgado de Instrucción Número 2 de Santiago. Con una carrera de fondo marcada por los casos de narcotráfico que pasaron por su mesa durante su estancia en el Juzgado de Vilagarcía, en manos de este orensano han caído las investigaciones más mediáticas de los últimos tiempos . Sus pesquisas tras la desaparición del «Códice Calixtino» se dilataron durante un año hasta que reveló la identidad del autor confeso del robo más sonado de España. Un electricista que no pudo ocultar sus tejemanejes en la Catedral y que acabó llevando al juez a un garaje de Milladoiro donde —cuentan los testigos que allí estaban— las lágrimas asomaron a los ojos de Taín cuando entre unos viejos sacos encontró el valioso texto.
Taín: « El Rey León
Después de echar el cierre a la instrucción de este proceso, Taín publicó una novela con muchos paralelismos con la historia de Castiñeiras, lo que le despejó definitivamente el camino de la popularidad. Pocos meses después, el juez pasaría por uno de los peores tragos de su carrera al darse a conocer el ataque que un hombre al que había condenado planeó contra sus hijos . La venganza se materializó aunque con los niños equivocados, sobre los que el procesado vertió ácido a su salida del colegio. Está siendo juzgado.
Especialista a la hora de encadenar casos mediáticos, de la mente del juez Taín nunca se borrará la guardia que le tocó cubrir el fin de semana del 22 de septiembre. La fecha fatídica en la que se produjo la muerte de la pequeña Asunta Basterra y que abrió la espita del crimen que heló la sangre de un país. Su trabajo a pie de campo en casos como el de la niña santiaguesa o en su lucha contra el narcotráfico le ha valido más de un apodo. Algunos de los investigadores que han trabajado con él lo conocen como el «Garzón gallego» y otro lo llaman el «Rey León» , por su entrega a la hora de elaborar y redactar los sumarios de los casos que capitanea.
Aláez, un juez a pie de vía
Vecino de Taín en los Juzgados de Santiago, el juez Luis Aláez —magistrado titular del juzgado de Instrucción número 3— saltó a la palestra mediática tras el descarrilamiento del tren Alvia el pasado 24 de julio . A pie de vía, Aláez contó con el refuerzo que Taín le dio pero, una vez superados los primeros momentos, el peso de uno de los procesos más dolorosos por los que ha pasado la Comunidad recayó directamente sobre él.
La magnitud de la tragedia obligó a reforzar el juzgado de Aláez con nuevo personal para agilizar la instrucción de un siniestro que le ha valido más de una crítica. Con 79 fallecidos y 147 damnificados, la decisión de Luis Aláez de imputar a todos los altos cargos de Adif y de solicitar un listado que incluyese el nombre de todas las personas que tuvieron responsabilidades relacionadas con la seguridad de la línea ferroviaria fue sonada . Su petición recibió pronta respuesta por parte de la Abogacía del Estado, que presentó un recurso contra las imputaciones apuntando a la «sobrehumana capacidad deductiva, prácticamente adivinatoria» del magistrado. Más tarde, la Audiencia Provincial de La Coruña apoyaría esta argumentación desimputando a todos los cargos.
Con el maquinista como único acusado , el accidente de la curva de A Grandeira provocó una revisión de las condiciones de las líneas ferroviarias que derivará en mejoras como la implantación de un canal único de comunicación con el conductor de tren, de forma que éste no podrá hacer uso del teléfono móvil salvo en casos de emergencias . Esta semana también se dio a conocer que los trenes dispondrán de registradores jurídicos y «cajas negras», que grabarán la velocidad.
Ahora, a punto de cumplirse los cinco meses desde que la mayor tragedia ferovaria de España, sobre la mesa de trabajo de Aláez se acumulan las declaraciones de los testigos del horror y todo tipo de documentación técnica sobre el fatídico viaje. Quienes trabajan con este juez destacan su sentido del orden y su cautela. Cualidades muy valoradas en su entorno profesional que de seguro necesitará para sacar adelante la instrucción de un caso sobre el que están puestas todas las miradas.
San José, cercanía y mano dura
En una esfera radicalmente distinta a la de Aláez se mueven sus homólogas en los juzgados de Lugo, Estela San José y Pilar De Lara. Estas dos magistradas famosas por destapar tramas de corrupción con ramificaciones que atraviesan las fronteras gallegas se han convertido en el azote de los corruptos. De la primera de ellas, Estela San José se ha llegado a decir que su trabajo al frente del Juzgado de Instrucción número 3 de Lugo causó un reguero de dimisiones que salpicó a alcaldes y diputados. Y es que la «Operación Campeón» — una investigación judicial sobre la presunta concesión de subvenciones irregulares a cambio de comisiones a cargos públicos — no dejó títere con cabeza y puso en la picota al empresario lucense Jorge Dorribo y al exministro de Fomento del Gobierno de Zapatero, el lucense José Blanco.
Pero la mano de San José —una magistrada muy apreciada por los funcionarios del juzgado de Lugo, que destacan de ella su conciencia social y su cercanía— también abarca los casos de violencia machista que llegan a los juzgados de la ciudad de la muralla. Extrovertida y amante del deporte , no tiene reparos a la hora de poner los puntos sobre las ies a los maltratadores que pasan por su sala porque, afirmó en una entrevista, cuando una víctima llega a su juzgado «el problema ya no tiene solución». «Puedes ayudarla, pero el golpe, la injuria, la vejación, la falta de libertad.. ya los ha sufrido».
El olfato de De Lara
Compañeras de juzgado, es frecuente ver a Estela San José y a la magistrada Pilar de Lara Cifuentes saliendo juntas de su centro de trabajo o compartiendo algún que otro café. El afán con el que se entregan a las investigaciones que caen en sus manos es común y también la paciencia con la que poco a poco van destejiendo tramas como la «Operación Carioca» , que convirtió a De Lara en una de las magistradas más valoradas y aplaudidas de la Comunidad. Y no es para menos.
Con precisión casi quirúrgica, la encargada del Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo destripó una red de prostitución que implica, presuntamente, a proxenetas y también a miembros de la Guardia Civil y la Policía Municipal. Repartida en 165 tomos que a su vez albergan cerca de dos mil folios cargados de nombres, fechas y datos, muchos compararon este caso con la «Operación Malaya». Fue la denuncia de una inmigrante ilegal que había trabajado como prostituta en uno de los clubes investigados la que encendió la mecha de un caso con casi un centenar de imputados cuyo juicio podría tener lugar a comienzos de 2014.
Tirando de uno de los hilos del caso «Carioca», el olfato de la jueza De Lara la llevó a descubrió en 2012 otra supuesta trama, en esta ocasión de corrupción empresarial y política, que bautizó como«Operación Pokemon». Con registros en los principales ayuntamientos gallegos y también en Asturias y Madrid, por el camino se quedó el exalcalde de Orense, Francisco Rodríguez, que renunció al cargo poco tiempo después de salir en libertad condicional imputado por cohecho y prevaricación.
Tras la oleada de registros en consistorios y sedes empresariales, la «Pokemon» daba un nuevo coletazo hace unos días con la inspección del ayuntamiento de La Coruña , en una tercera fase tras la «operación Manga» , denominada «Pikachu» . Una de las últimas órdenes que Pilar De Lara mandó ejecutar en el seno de un caso de amplio trasfondo que amenaza con dilatarse en el tiempo.
Acostumbrados a abrirse paso en medio de la oscuridad y a lidiar con los asuntos más peliagudos, Taín, De Lara, Aláez o San José se han convertido en protagonistas, sin quererlo, de las investigaciones más mediáticas.
Jueces gallegos «estrella»: En el juzgado y en los medios
Noticias relacionadas
- Vázquez Taín: «No me importa pagar el peaje de decir lo que pienso en libertad»
- Vázquez Taín: «El Códice merecía otro robo a la altura de Galicia»
- «Caso Asunta»: La crueldad de unos padres señalados
- El juez del Alvia pide a Adif más informes al margen de la causa «obvia» del siniestro
- Adif cree que el auto del juez Aláez «no está muy claro»
- La mitad de los imputados en el «caso Campeón» solicitaron el sobreseimiento de la causa
- La fase de instrucción de la «operación Campeón» se cierra casi dos años después
- El TS que investiga a Blanco levanta el secreto de sumario del «caso Campeón»
- Cuarenta empresas para captar contratos públicos
- Prostitutas censadas en la Comandancia de la Guardia Civil de Lugo
- Diez de los doce detenidos en el operativo policial han sido arrestados en Galicia
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete