«No se espera una gripe excesivamente agresiva este invierno»

—¿Por qué es importante vacunarse?

— Se recomienda vacunarse porque la gripe provoca una onda epidémica, de mayor o menor intensidad, que afecta a los grupos de riesgo —mayores de 60 años y personas con patologías como enfermedades crónicas del corazón, del aparato respiratorio o con inmunidad comprometida por procesos cancerígenos—, causando mayores complicaciones de sus enfermedades, que pueden implicar el ingreso. Así se producen sobrecargas en los centros sanitarios, un hecho que evitamos con la vacuna. Afortunadamente, llevamos una década de ondas epidémicas no muy intensas.

—¿Hay algún baremo que determine con antelación la intensidad del virus?

— No. Nosotros nos guiamos por lo que sucede en el hemisferio sur. Las gripes circulan durante la época invernal, y cuando aquí es verano, allí pasan por los meses de mayor contagio de gripe. Digamos que nuestro espejo inverso es éste y nos puede orientar en cierta medida, aunque siempre se producen diferencias. Tomamos este punto para guiarnos, pero con unos intervalos de referencia muy amplios.

—¿Cómo será la de este año?

— La de este año parece que va a ser leve, con un 30 por ciento de probabilidad. El nivel de certeza es pequeño pero creemos que seguirá esta línea. Por lo que vimos en el hemisferio sur, se espera que circule un poco más la A(H3N2), por lo que el impacto puede ser algo mayor en la población adulta, y el mismo virus de tipo B que circuló el año pasado. En general no se espera que sea excesivamente agresiva este invierno.

—¿Está concienciada la sociedad de la importancia de esta vacuna o a la gripe no se le teme?

— Creo que tenemos que seguir trabajando para que la gente conozca bien el problema y tenga una mejor imagen de la benignidad de la gripe. Tenemos que erradicar la idea de que las vacunas responden a un interés comercial porque realmente son un éxito innegable de la medicina. Evidentemente la vacuna contra la gripe tiene unas características diferentes que la hacen especial, como el hecho de tener que vacunarse cada año, algo que no ocurre con las demás vacunas. Esto se debe a que el virus muta, pero algún día lograremos la vacuna universal contra la gripe.

—¿En qué medida reduce el riesgo de contagio esta vacuna?

— Tiene una eficacia menor que otras vacunas. En este caso, se hace contra unas cepas concretas del virus; si muta, es menos eficaz. Con todo, la eficacia a nivel global es superior al 50 por ciento, pudiendo llegar al 70 u 80 por ciento. Aquellos interesados en vacunarse únicamente deben pedir cita en su centro sanitario. Se trata de una vacuna muy accesible.

—¿Cuáles son los meses más sensibles a la gripe?

— El virus empieza a circular a partir de noviembre. Entre diciembre y febrero es el espacio de tiempo en el que más circula este virus, con mayor intensidad en enero, donde alcanza el pico. La onda de gripe dura unas ocho semanas: se detecta, se mantiene en el pico y vuelve a disminuir con la misma celeridad.

—Una vez vacunados, ¿qué consejo les da a los pacientes?

— Hay unos consejos básicos de higiene respiratoria que deberíamos de respetar todos. Por un lado, hay que lavarse frecuentemente las manos, sobre todo después de estornudar, para evitar contagios. La gente con mayor riesgo de complicaciones de la gripe e debe evitar aglomeraciones humanas, , situaciones en las que se facilita la a transmisión del virus. Y principalmente debe evitarse toser contra otro. De igual modo, recomendamos a la población sana (que no sufra patologías de riesgo) que se cuiden y, en mayor medida, se vacunen si tienen a su cuidado alguna de estas personas con mayor peligro de contagiarse.