Las Xuventudes Socialistas eligen líder en medio de impugnaciones e irregularidades

Las motivaciones que llevaron a Chema Castrillo , el segundo en discordia, a dar un paso atrás, hay que buscarlas en la «serie de irregularidades que se produjeron y que vulneran los derechos de los militantes de la organización» . Y es que, según explicó el cabeza visible de la candidatura que tenía por lema «Somos presente», un 45 por ciento de los delegados que participaban en el XIV Congreso Nacional aunaron fuerzas para presentar ante la Mesa del Congreso un escrito a través del que solicitaban la impugnación y la repetición del mismo.

Los denunciantes -que pertenecen a 20 agrupaciones diferentes de las XSG del total de 55 con las que cuenta la organización en toda la Comunidad (en el congreso solo participaron 48)- criticaron la decisión adoptada por la Mesa de no permitir que se acreaditase en la tarde del sábado a 7 delegados . Según su testimonio, fue la representante de la dirección federal de las Juventudes Socialistas de España la que la emitió esta decisión, que desde «Somos Presente» calificaron como sin precedentes en la historia de la Xuventudes Socialistas de Galicia .

Entre su lista de reproches al desarrollo del encuentro, los críticos explicaron que a tres militantes que sí habían sido acreditados inicialmente, se les impidió participar en la votación para la elección del nuevo secretario xeral. Un hecho que supone «una falta grave atendiendo a los Estatutos de la Organización», apuntan.

El desacuerdo con las acreditaciones afectó también a otros cuatro delegados que en la tarde del sábado se acercaron al Congreso y a los que se les negó la acreditación, según refleja el escrito suscrito por el 45 por ciento de los delegados.

Ante todas estas circunstancias irregulares, Chema Castrillo optó a última hora por retirarse y no concurrir a la votación , aunque sí acordó participar en los demás puntos del Congreso, como las que deciden los representantes para los distintos órganos a nivel nacional y federal.

Significativo fue que a la llegada de Manuel «Pachi» Vázquez al XIV Congreso de las XSG, un grupo de delegados decidiesen abandonar la sala en protesta por el sistema de elección del nuevo secretario general de esta organización juvenil. «Es inaudito que el secretario xeral de las Juventudes Socialistas entre de la mano del secretario general del partido», señaló uno de los críticos en un gesto que atribuyó a «la poca autonomía que va a tener la organización» en adelante.

En urna pero sin rival

Por su parte, el elegido Aitor Bouza pidió que se votase en urna pese a la retirada de su adversario y al retraso con el que se iniciaron las votaciones. En su discurso, Bouza aseguró que luchara «por las primarias» como medio para conseguir la participación de todos los militantes de las juventudes. «Tenemos que trabajar entre todos para conseguir un bien reglamento que establezca la primarias como modo de elección del secretario xeral e, incluso, ir más allá que sólo de un militante, un voto».

En cuanto al papel que los jóvenes deben jugar en un partido que atraviesa sus horas más bajas, Bouza apostó porque la organización se convierta en un altavoz para los jóvenes gallegos . Para aproximarse a las demandas de la población, el ferrolano prometió celebrar una conferencia política cada año «para actualizar y tomar contacto con la realidad de los ciudadanos» expuso.

En cuanto a la polémica derivada de la «arbitrariedad» de la mesa para cerrar las acreditaciones, Bouza rechazó los motivos de la impugnación y destacó que el congreso -en el que resultó elegido con un 96% de los votos- se celebró «con total normalidad».