Jordi Clos: «No me interesan los países ocupados por el turismo de masas»
El hotelero, mecenas y egiptólogo barcelonés hace memoria en «Con la vida en los talones»
sergi doria
La pasión por correr mundo de Jordi Clos (Barcelona, 1950) se desvela en los primeros pasajes de “Con la vida en los talones” (La esfera de los libros): un padre perdedor en la guerra civil, un niño confinado por la polio en un piso del ... Raval y una madre volcada en su cuidado para que consiga salir adelante… Un adolescente que, como Terenci Moix, descubre Egipto en el mercado dominical de los Encantes de Sant Antoni cuando adquiere a plazos una colección de grabados del país de los faraones. Un emprendedor quinceañero que monta con sus compañeros de los Escolapios una empresa comercial y que hoy preside la pujante cadena Derby Hoteles y la Fundación Arqueológica.
La memoria de Clos es cartográfica: en 1969 adquiere la primera pieza egipcia, germen de su colección: “Dormí toda la noche aferrado a aquella terracota con jeroglíficos”; Egipto es su sino: allí conoce en 1975 a su mujer, Montse Casellas. Con ella recorrerá Cachemira y Tibet. En 1979 realiza su “bautismo de fuego” aventurero con un jeep. Sudán, Mali, Costa de Marfil, Níger, Burkina Faso, Etiopía, las tribus konso, hamer, surma…
Algún momento malo, como la batalla de los donga que le obliga a encaramarse a un árbol para refugiarse “cuando los disparos sustituyeron a las lanzas…”; o la difícil relación con los políticos corruptos del Sudán que extorsionaban a los arqueólogos para financiar con ese dinero la guerra contra los cristianos coptos. Momentos estelares. Descubir en 2007 la tumba inviolada de Sharuna: “Había vivido la emoción de mi primera excavación en Oxirrinco, la majestuosidad del descubrimiento aéreo en Sudán, per ahora me disponía a abrir en persona una tumba de principio a fin”.
Clos lamenta que hoy ya no se puede viajar a un Egipto arruinado por el enfrentamiento entre los Hermanos Musulmanes y el Ejército. Al viajero, el planeta le ha quedado pequeño y el empresario hostelero prefiere la calidad sobre la cantidad: “Sólo me interesan los lugares donde todavía no ha llegado el turismo de masas”.
El 4 de octubre recorrerá el Tibet de Katmandu a Lhasa y compartirá la vida de los monasterios… El autor del Plan Estratégico que puso a Barcelona en el mapa turístico internacional -de cuatro a dieciséis millones de pernoctaciones- explica porqué ha llegado hasta hoy con la vida en los talones: La vida te empuja y te das cuenta de cómo has cambiado”.
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