Messi comienza a negociar un pacto con Fiscalía por su fraude fiscal

El jugador podría saldar sus cuentas con el fisco con el pago de 9 millones de euros

Messi comienza a negociar un pacto con Fiscalía por su fraude fiscal reuters

j. guil

Leo Messi ha comenzado a mover pieza para saldar sus cuentas con la justicia, que la acusa a él y a su padre, Jorge Horacio, de defraudar a Hacienda hasta 4,1 millones de euros en ingresos por derechos de imagen en sus declaraciones del ... IRPF de 2007, 2008 y 2009.

Según han confirmado a ABC fuentes judiciales, los abogados del jugador, Cristóbal Martell y Ángel Juárez, se han reunido esta mañana en la Fiscalía de Delitos Económicos de Barcelona con la fiscal que firma la querella contra él y su padre, Raquel Amado, para intentar zanjar el caso con un acuerdo. Fiscalía acusa a Messi y a su padre de defraudar 4,1 millones al fisco simulando la cesión de sus derechos de imagen a empresas radicadas en paraísos fiscales. El jugador estaría dispuesto a reconocer los hechos de los que se le acusa, pagaría lo defraudado, más intereses, más una multa, y, a cambio, obtendría una rebaja sustancial de la pena y de la multa. Le evitaría ir a la cárcel y el juicio, aunque no le ahorrará a él y a su padre declarar ante la juez de Gavà (Barcelona) como imputados el próximo 17 de septiembre. Con todo, de llegarse a un acuerdo con el fiscal éste debería obtemer el visto bueno de la Abogacía del Estado, personado en esta acusa como representante de la Agencia Tributaria.

"Ha sido una primera toma de contacto. No se ha llegado a ningún acuerdo", han precisado fuentes de fiscalía, aunque otra fuentes apuntan a la posibilidad de que Messi pueda saldar sus cuentas con la justicia con el pago de una cantidad que oscilaría entre los 5 y 9 millones de euros.

El fraude fiscal se castiga con hasta penas de 1 a 6 años de cárcel, además del pago de una multa, que puede ser de hasta el séxtuplo de lo defraudado, del importe defraudado e intereses. Sin embargo, tras la última reforma del Código Penal vigente desde este año, a Messi se le abre una salida. Si antes de que transcurran dos meses desde su imputación, que fue el 20 de junio, reconoce los hechos, devuelve lo defraudado y paga la multa. De llegar a este acuerdo con Fiscalía, que luego debería concretarse en una sentencia de conformidad, la juez podría rebajar en hasta dos grados la pena por cada delito, lo que en el mejor de los casos se traduciría en una pena total de 9 meses de cárcel, que no se haría efectiva al carecer de antecedentes. Además, en este caso la multa podría ser rebajada.

Ya pagó 10 millones

Otra opción que baraja la defensa del jugador es que el padre del jugador, al que la Fiscalía considera como ideólogo del fraude, asuma toda la responsabilidad e intente demostrar que su hijo, aunque avaló el entramado de sociedades con su firma cuando ya era adulto, no sabía que era ilegal.

Tras hacerse pública la querella, Messi ya ha dado muestras de querer intentar zanjar el asunto con dinero y sin llegar a juicio, aunque eso implique declararse culpable. Prueba de ello es que el jugador realizó el mes pasado dos declaraciones complementarias del IRPF de los años 2010 y 2011, que podrían haber acabado incorporándose a la querella, aprovechando que estos ejercicios fiscales aún no habían prescrito administrativamente, lo que permite regularizarlos con Hacienda sin llegar a la justicia ordinaria.

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