Un viaje de cuatro millones de años

La base de la misma son las propias piezas del museo, que muestran los principales hallazgos de Atapuerca , pero también se mira más atrás, hacia los rastros de la evolución encontrados en África, concretamente en la garganta de Olduvai y Laetoli, ambos en Tanzania.

La muestra se encuentra dividida en cinco grandes apartados, donde la exposición presenta más de cien herramientas originales , algunas de ellas con una antigüedad cercana a los dos millones de años. Además, cuenta con reproducciones de moldeado en directo y escaneado en 3D , que muestran restos de Australopitecus, de los primeros homos, junto a fósiles tan emblemáticos como Lucy o el niño de Taung. El objetivo es mostrar cómo surgió el género humano hace casi cuatro millones de años hasta llegar al momento actual.

Para el director científico del museo, que al mismo tiempo es el codirector de los yacimientos de Atapuerca, Juan Luis Arsuaga , la exposición es un «sueño cumplido» porque confirma al Museo de la Evolución Humana como el centro mundial de los estudios de prehistoria, que fue la pretensión con la que nació hace ya cuatro años. La muestra, que permanecerá en el Museo de la Evolución Humana hasta diciembre, supondrá además un atractivo añadido para los participantes en el XVII Congreso Mundial de la Asociación Científica Internacional de Ciencias Prehistóricas y Protohistóricas que se celebrará en Burgos en septiembre.

«La Cuna de la Humanidad» cuenta como comisarios con Enrique Baquedano, director del Museo Arqueológico Regional de la Comunidad de Madrid y Premio Castilla y León de Restauración y Conservación del Patrimonio 2012, y Manuel Domínguez, director del Institute of Human Evolution in Africa, IDEA .