Un concejal crítico con la «casta socialista» se postula como candidato

El edil, uno de los promotores de la plataforma «Socialismo & Ciudadanía», tiene clara la necesidad de regenerar el PSOE y confiesa a los cuatro vientos que sería para él un «tremendo placer» disputarle el cargo al actual secretario federal de Organización y portavoz socialista en las Cortes de Castilla y León, Óscar López. Está crecido y dice sentirse «en condiciones de darle la bofetada democrática que se merece». Va incluso más allá y augura que su candidatura «generará reacciones adversas» contra su persona en el partido. «Me he comprado un chaleco antibalas porque les conozco», bromea públicamente...

Aún así, condiciona su candidatura a la eliminación de la exigencia de avales y a la capacidad de voto para militantes y simpatizantes. «Eso es abrir de verdad el partido a la sociedad», advierte abonando el camino. No quiere «bendiciones» de los famosos barones sino que defiende la necesidad de recibir el apoyo «del pueblo llano» e invita a dar el salto al ruedo de la política a «mucha gente como yo, jóvenes aunque sobradamente preparados».

Reconoce que el viernes pasado sintió «vergüenza» y que eso le llevó a acometer «este acto de rebeldía» frente al sistema que encarnan Óscar López y Julio Villarrubia, a los que propuso dar un paso al lado. Pero también admite que Villarrubia «no se merecía esa muerte política»... así que apuesta por tender puentes a todos los equipos, «formados por gente válida» que trabajan «dentro de un sistema mal configurado».

Javier Arranz, que hizo un llamamiento a militantes socialistas de todas las ciudades para «echar a la casta del PSOE», ha mostrado abiertamente en varias ocasiones sus críticas al aparato del partido: por los vinos de Navidad mientras «la gente no llega a fin de mes» o por la ausencia de expedientes para los responsables públicos ante casos como el «Faisán», «Ponferrada» o «Caja Segovia». Incluso llegó a plantearse su salida tras su enfrentamiento con el secretario provincial del partido en Segovia y tras varios «choques» públicos.

Saltó a la «fama» por publicar, desde el Ayuntamiento segoviano y sin revisar, un CD que incluía una canción punk con injurias al Rey, pero también ha subido a la palestra la declaración de bienes e ingresos que colgó en Facebook para exigir transparencia a los cargos públicos. «Sólo así se demostrará que el 99% de las personas que se dedican a la política son honradas, humildes y trabajadoras y no se enriquecen tras años en la política».