El jefe de Bomberos de Burgos cree que un detector de humos habría evitado la tragedia de Tordómar

En rueda de prensa, Estébanez declaró que se trata de una «instalación sencilla y barata» que, a diferencia de los detectores de humos de hoteles o grandes complejos, no requiere de conexión eléctrica, sino que se puede colocar «con tornillos y adhesivos».

En caso de incendio y más si éste se produce cuando los inquilinos de la vivienda están durmiendo, el detector emitiría una señal acústica de alarma que despertaría a las personas que se encuentran en la casa. «Es importante que se tomen medidas preventivas de esta naturaleza», insistió el jefe de Bomberos de Burgos, quien considera que con este tipo de instalaciones se pueden salvar muchas vidas, informa Ical.

Estébanez añadió que se trata de instalaciones «baratas» que en caso de una situación de incendio pueden salvar las vidas de quienes se encuentran ante una situación de peligro, como la que vivió hace apenas unos días la familia asturiana alojada en la casa rural ‘Ribera del Arlanza’, y que lamentablemente no se percató del incendio hasta que las consecuencias fueron fatales.

Por otro lado, y en relación a la actuación que realizó el cuerpo de bomberos ante la tragedia del pasado sábado, Estébanez recordó que los bomberos de la capital solo actúan en un radio de 22 kilómetros, tal y como se acordó en un convenio rubricado en el año 2010 con la institución provincial. «Fueron los bomberos de Lerma y si hubiera sido necesario hubiéramos ido nosotros», matizó el jefe del cuerpo de Bomberos de la capital burgalesa.

Según el protocolo de actuación ante el incendio registrado en la casa rural de Tordómar, una vez que se recibió la llamada de emergencia, acudieron hasta el lugar los bomberos voluntarios de Lerma, y si hubiera sido necesario, «hubieran ido los de Santa María del Campo (Burgos)», aseveró. «Nosotros hubiéramos tardado 50 minutos porque hay 47 kilómetros, por lo que la respuesta ya no hubiera sido inmediata», finalizó.