Imputado un arqueólogo por apropiarse de restos históricos

Según fuentes de la Benemérita, las investigaciones han sido llevadas a cabo por agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil. Las iniciaron tras recibir informaciones que apuntaban a la existencia de abundantes restos arqueológicos en un almacén situado en la localidad de La Muela (Zaragoza), en una nave propiedad de una empresa dedicada a la restauración de inmuebles históricos que está situada en el polígono industrial «Centrovía».

Los agentes localizaron en el interior de esta nave un total de 69 cajas con abundantes restos de interés arqueológico , entre ellos piezas de cerámica, objetos domésticos, monedas e incluso restos óseos de diversas épocas, entre ellas la visigoda y romana.

De varias localidades

Entre las piezas recuperadas por la Guardia Civil y entregadas a la Dirección General de Patrimonio Histórico del Gobierno aragonés destaca un cierre de arca hecho en bronce y de origen visigodo , una vinajera y una aceitera de cristal soplado, un anillo de bronce y hueso, un dado de seis caras de origen romano y hecho también con material óseo, numerosas monedas de bronce de distintos períodos históricos y un pequeño cristo de cerámica que podía provenir de las obras de restauración que se hicieron en la iglesia de Ponzano (Huesca) hace años.

A falta de que se concrete definitivamente el origen de las piezas que se han recuperado, la Guardia Civil cree que pueden proceder de prospecciones arqueológicas llevadas a cabo, entre los años 2006 y 2009 , coincidiendo con las obras de restauración realizadas en diversos puntos de Aragón. Entre ellos, se apunta a la iglesia de Santa María de Magallón (Zaragoza), al Castillo de Montearagón (Huesca) y a la casa parroquial de Villanueva de Gállego (Zaragoza).

En el caso de la iglesia de Magallón , la Guardia Civil ha confirmado durante la investigación que el arqueólogo no comunicó a las autoridades autonómicas de Patrimonio, como es obligación, el hallazgo de los restos de valor histórico que se encontraron durante las prospecciones arqueológicas . De hecho, no presentó el informe en el que se debía hacer constar esta circunstancia, pese a que han pasado más de seis años desde que se llevaron a cabo dichas obras.