Ripoll, el afín a Zaplana que lideró el PP de Alicante hasta el caso Brugal

El president de la Generalitat, Alberto Fabra, ha anunciado hoy en Castellón el nombre del sustituto de Ripoll (Juan Ferrer), cuyo relevo está previsto a partir de mañana.

Arquitecto de profesión y padre de tres hijos, Ripoll entró en política en las filas de UCD y se abrió camino como concejal en el Ayuntamiento de Alicante (1987-1991) antes de convertirse en senador en 1993.

Sin embargo, el paso de Ripoll por la política ha estado marcado por su estrecha amistad con Eduardo Zaplana, quien a su llegada en 1995 al Palau de la Generalitat le nombró conseller de Administraciones Públicas (1995-96) y posteriormente conseller de Presidencia y vicepresidente segundo (1999-2003).

La marcha de Zaplana a Madrid como ministro de Trabajo le elevó durante unos meses como segundo en el Consell, tras José Luis Olivas, y después de las elecciones de 2003 regresó a Alicante para presidir la Diputación y liderar a los populares de la provincia.

Poco antes habían surgido las primeras discrepancias internas en el PPCV entre los afines a Zaplana y los cercanos a su sucesor en la Generalitat, Francisco Camps, y en este ambiente fue la cabeza visible del primer grupo desde Alicante.

La escasa empatía entre Ripoll y Camps se tradujo en un goteo de dirigentes del PP que pasaron de adscribirse del bando del primero al del president, no sin momentos de alta tensión interna, sobre todo en la provincia de Alicante.

Durante dos mandatos y bajo la bandera de los intereses «alicantinistas», mantuvo diversos pulsos con Camps, quien en 2008 estuvo a punto de lograr apartarlo de la presidencia del PP con un candidato alternativo, el benidormí Manuel Pérez Fenoll, durante el convulso congreso provincial de Orihuela, que ganó Ripoll por tan sólo cinco votos de diferencia.

Sin embargo, el ocaso a su influencia llegó a principios de julio de 2010 cuando la Policía Nacional le arrestó por unas horas y registró su domicilio y despacho en la Diputación por la rama del caso Brugal relativa al presunto amaño en la adjudicación del plan comarcal de residuos de la Vega Baja.

En las elecciones locales de 2011 logró volver a situarse como número dos en las listas populares al ayuntamiento alicantino por detrás de una de sus «enemigas», la también popular Sonia Castedo, pero tras tomar posesión y comprobar que no contaba con apoyos suficientes para repetir en la Diputación y quedarse sin competencias ni sueldo en el consistorio decidió abandonar su acta.

Aún como presidente provincial del PP antes de que le sucediera José Císcar, la situación le llevó a apuntarse al paro el 1 de agosto de 2011.

Un mes después fue «repescado» para ocupar la presidencia de la Autoridad Portuaria de Alicante, donde ha permanecido ya en un discreto segundo plano político hasta hoy.